Fuerzas afganas lanzaron este martes una contraofensiva en la provincia de Kunduz (norte) del país que fue ocupada recientemente por los talibanes.

"Refuerzos del ejército afgano comenzaron la operación para reconquistar la ciudad de Kunduz a las 08H00 (03H00 GMT) del martes”, informó el Ministerio de Defensa.

En un comunicado, el ministerio acotó que en la operación apoyada por Estados Unidos (EE.UU.) se trató de recuperar la ciudad tomada el lunes por el grupo extremista, pero solo lograron controlar la sede central de la policía y la cárcel. 

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"La batalla está en marcha. Las fuerzas afganas se enfrentan a la resistencia de los talibanes pero logran avanzar", dijo por su parte, Sayed Sarwar Hussaini, portavoz de la policía de Kunduz.

Hussaini añadió que la operación comenzó desde tres puntos distintos, y resaltó que varios refuerzos apoyaron a las unidades en la ciudad, donde la infantería está recibiendo respaldo aéreo. “La ciudad será recuperada en las próximas horas", afirmó.

EE.UU. apoyó con artillería la contraofensiva en un momento en el que el Ejército afgano no cuenta del todo con la actuación de soldados enviados por la Organización Tratado Atlántico Norte (OTAN). 

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Más de 13 mil efectivos de la OTAN, en su mayoría de EE.UU., se encuentran presentes en el país para entrenar a militares afganos, según la agencia AFP. Sin embargo, las fuerzas estadounidenses controlan drones desde las bases para bombardear blancos en el este del país, principalmente. 

En Contexto 

El presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, tiene un año en el poder tratando de recuperar la seguridad del país que además se enfrenta a una ralentización económica. 

Los talibanes han dejado claro al Gobierno que no habrá paz en Afganistán sin la salida definitiva de las tropas extranjeras y la disolución de los tratados militares. 

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La OTAN mantiene aproximadamente cuatro mil militares en Afganistán “en misión de asistencia y capacitación Apoyo Decidido", mientras que Estados Unidos mantiene una operación de combate o "antiterrorista" que incluye a unos nueve mil 800 oficiales.