Tanto el Kremlin como la Casa Blanca evaluaron la reunión celebrada este miércoles entre el presidente de Rusia, Vladímir Putin, y el enviado especial del presidente estadounidense, Steve Witkoff, de “constructiva”.

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Desde el Kremlin, el asesor presidencial ruso, Yuri Ushakov, calificó la reunión como «útil y constructiva» y detalló que durante las conversaciones se trataron el conflicto ucraniano y las perspectivas de un posible desarrollo de cooperación estratégica entre Moscú y Washington.

Añadió que Moscú transmitió «algunas señales» y recibió «las señales correspondientes del presidente Trump».

Cabe destacar que esta fue la quinta reunión entre Putin y Witkoff desde principios de año, con la última habiendo ocurrido en abril, en un contexto de persistentes negociaciones sobre el conflicto en Ucrania.

Por su parte, el presidente de EE.UU., Donald Trump, se pronunció a través de Truth Social, calificando la interacción como «muy productiva» y afirmando que «¡Se lograron grandes avances!».

Trump también indicó que, tras el encuentro de su enviado especial, informó a varios aliados europeos, subrayando que «todos están de acuerdo en que esta guerra debe llegar a su fin, y trabajaremos para lograrlo en los próximos días y semanas».

La reunión se produce en medio de repetidas amenazas por parte de Trump de introducir aranceles y otras restricciones económicas a Moscú si no se alcanzaba un acuerdo de paz con Kiev.

El encuentro se celebró poco antes de que expirara un ultimátum de Trump, reducido de 50 a 10 días, para que Rusia detuviera la guerra en Ucrania.

Arancel adicional del 25% a India por compra de petróleo ruso

Mientras Washington intenta calmar las tensiones con el Kremlin, el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva este miércoles para imponer un arancel adicional del 25 por ciento a India por la compra de crudo ruso.

La medida aplica un arancel ‘ad valorem’ adicional del 25 por ciento a los artículos de la India importados al territorio aduanero de EE.UU., con efecto 21 días después de la firma del decreto.

El comunicado define «petróleo de la Federación de Rusia» como petróleo crudo o productos derivados extraídos, refinados o exportados desde Rusia, sin importar la nacionalidad de la entidad involucrada.

Además, contempla también la «importación indirecta», que sugiere la compra a través de intermediarios o terceros países donde el origen del petróleo pueda rastrearse razonablemente hasta Rusia; lo que también podría introducir estas sanciones.

Con la aplicación de estas sanciones unilaterales, las tensiones ya existentes entre Washington y Nueva Delhi se van incrementando.

Y es que el pasado 4 de agosto, Trump amenazó con un “golpe arancelario sustancial» a India, acusándola de obtener «grandes ganancias» de la venta de crudo ruso y de «no preocuparse» por las pérdidas humanas en Ucrania.

En respuesta, el Ministerio de Asuntos Exteriores indio calificó los señalamientos de «injustos e irrazonables» y argumentó que comenzó a importar petróleo de Rusia porque sus «suministros tradicionales se desviaron a Europa tras el estallido del conflicto», y que, en aquel entonces, «EE.UU. promovía activamente dichas importaciones por parte de India para fortalecer la estabilidad de los mercados energéticos mundiales».

Siguiendo esta línea, India ratificó en un comunicado emitido por su Ministerio de Relaciones Exteriores sus nexos con Rusia, defendiendo su derecho soberano a establecer relaciones basadas en sus intereses nacionales.

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