Argentina, Pagliaro, Cabrera y una canción
Héctor Cabrera sucumbió en Caracas, a un cáncer de próstata el 6 de junio del 2003 a la edad de 71 años. Cambió de paisaje en la misma ciudad que le viera nacer .
31 de julio de 2024 Hora: 10:33
El productor del Festival de la Canción de Buenos Aires, Argentina, Aldo Fabré, cursó invitación de participación a otro venezolano, el también exitoso caraqueño Héctor Cabrera.
Por Lil Rodríguez
En 1969 la vocalista venezolana Mirtha Pérez había acaparado la atención de jurado y público en el Tercer Festival de la Canción de Buenos Aires, Argentina, un festival estructurado a partir de lo que fue y era la experiencia del Festival de San Remo en Italia.
La exitosa vocalista que fuera integrante del famoso cuarteto “Los Naipes”, en noviembre de 1969 defendió en Buenos Aires el tema del argentino Dino Ramos “La Nave del olvido”. Obtuvo el segundo lugar pero ganó absolutamente en popularidad y el tema se convirtió en un posterior éxito de ventas discográficas con altas cifras.
Al año siguiente el productor de ese Festival argentino, Aldo Fabré cursó invitación de participación a otro venezolano, el también exitoso caraqueño Héctor Cabrera.
Habiendo aceptado Cabrera la invitación casi enseguida recibió una visita que cambiaría el panorama de su vida artística. Viajó a Caracas el autor del tema que Héctor Cabrera defendería en el festival de Buenos Aires. Quedó develado el tema, y éste no sería nada fácil si tomamos en cuenta que para ese momento había una dictadura militar en Argentina.
Gian Franco Pagliaro, cantautor ítalo argentino, apenas vio a Héctor Cabrera le dijo: “O vas directo a la fama continental o vas directo a la cárcel, pero en cualquiera de las opciones, tendrás una gran publicidad”. Así quedo sellado ese pacto musical que removió los cimientos del público tanto en Venezuela como en Argentina los días 26, 27 y 28 de septiembre de 1970.
Claro que Gian Franco Pagliaro era ampliamente conocido en la tierra que adoptó para residir, y que lo recibió a él y su familia con nobleza y amistad. Pero en otros países no era tan conocido a pesar de aportes importantes que hizo a la Nueva Canción que se gestaba en la América Latina.
Desde Nápoles llegó
Estaba en pleno desarrollo la llamada Segunda Guerra Mundial, en la que Italia participaba cuando Gian Franco Ottaviano vio la primera luz el 26 de julio de 1941 en Nápoles. (estaría por cumplir 83 años de edad). Sus padres eran Francesco y Anna y sus hermanos Antonio, Annamaria y Sonya. Sus inclinaciones artísticas comenzaron a temprana edad, tanto en el dibujo como en la música. En su familia era cosa de todos los días cantar arias de ópera y canciones napolitanas.
Un buen día la familia decidió cruzar el Atlántico hacia América, llegando a Brasil donde permanecieron por unos dos años para luego seguir hacia Argentina. Chivilcoy, en la provincia de Buenos Aires, y unos familiares paternos les recibieron.
Un detalle que llama la atención es que el padre siempre avisó que regresarían a Italia, por lo que Pagliaro cantaba en italiano, hasta que un día decidió asimilarse al castellano para la música.
Aún así su padre le asignó un profesor en italiano para lengua, literatura, filosofía y Arte. Ese profesor, Ginobili fue determinante en el rumbo que tomaría la vida de Gian Franco Pagliaro
Consiguió en 1965 un contrato para cantar en un Piano Bar y logró hasta un contacto en televisión. Pintaba bien el tiempo, pero un acontecimiento imprevisto e internacional cambiaría su vida y le llevaría a la popularidad inmediata en Argentina. Pasó que el representante italiano en el Festival de San Remo 67 se suicidó. Defendía el tema titulado Ciao amore, ciao. Como Pagliaro hablaba italiano le propusieron grabar el tema porque no había sido llevado al acetato. Fue un verdadero bombazo que lo puso no solo de moda. Quienes le escuchaban presentían en él una nueva manera de expresión a través del canto.
Hizo exitosas grabaciones en italiano hasta que se decidió a grabar en Castellano. “Otra vez en el mismo bar”, “Todos los barcos todos los pájaros”, “Vendrás con el mar las uvas y el sol” se convirtieron en temas exitosos ya no solo en Argentina sino en todo el continente.
En 1969 sale a la venta su primer álbum en español: “Gian Franco Pagliaro en castellano”.
Todos los barcos, todos los pájaros
Y aparece Héctor Cabrera
En septiembre de 1970 Gian Franco Pagliaro, en tanto que autor gana por unanimidad de público y jurado el IV Festival Buenos Aires de la Canción, con su tema “Las cosas que me alejan de ti”. Un tema defendido por la voz del venezolano Héctor Cabrera. El tema cuestionaba y denunciaba la realidad social argentina, algo inaceptable para los colaboradores del gobierno militar de entonces.
Con ese espaldarazo popular al año siguiente Pagliaro se presentó defendiendo su tema “Yo te nombro (libertad)”. El tema obtuvo todos los votos posibles… pero fue descalificado. El escándalo fue tal que el propio Festival dejó de hacerse a partir de entonces, pero lo cierto es que el cantautor se declaró comprometido con la nueva Canción Latinoamericana, como serían Jorge Cafrune, Atahualpa Yupanqui, Mercedes Sosa, Facundo Cabral, Víctor Heredia, León Gieco, Teresa Parodi y Piero, entre otros en Argentina.
Pagliaro falleció en Buenos Aires el 27 de marzo de 2012. Sus restos descansan en el Cementerio de la Chacarita de la capital argentina en el Panteón del Sindicato de de Autores y Compositores de la Argentina (Sadaic).
El Poeta de la Canción
El venezolano fue el más ovacionado la noche del festival el 26 de septiembre de 1970 pero deberían quedar pocos finalistas y el quedó para la noche del 28. Ese día fue ovacionado aun más y ganó el concurso con 27 votos de 34.
Ampliamente querido en su tierra natal, nació Héctor José Cabrera Medina en el oeste de Caracas el 13 de febrero de 1932 como dueño de una de las voces más hermosas de la música en Venezuela. Su padre era andino y su madre del centro del país. Todos sabían que sería un extraordinario cantante y con esa promesa llegó a las manos del profesor de canto Juan Martín de Armas.
A los 15 años de edad, en 1947 participó en un programa radial acompañado (en el piano) nada menos que por Aldemaro Romero. Dos años después sería su lanzamiento profesional.
Héctor Cabrera participó en programas televisivos, radiales, musicales, grabaciones y locales nocturnos. Fue ganando popularidad y cuando el también cantante Mario Suárez lo presentó al compositor Juan Vicente Torrealba éste le daría su inmortal canción “Rosario” con letra de Ernesto Luis Rodríguez para que la estrenara. Aquello fue todo un suceso en el ambiente musical venezolano.
Rosario
Héctor Cabrera residió durante unos años en Cuba y otros años en México, siempre convocado por su popularidad.
Para 1970 las estrellas le cambiaron el destino por completo cuando tuvo el encuentro con Gian Franco Pagliaro que desembocó en ese Festival de la Canción de Buenos Aires, donde Cabrera defendió con altura, solidaridad y gallardía un complicado tema. No era un tema fácil, era un tema social y político para ser entonado en un país bajo una dictadura militar.
Jean Franco Pagliaro con su canción “Las cosas que me alejan de ti”, no necesitó de mucho para convencer al venezolano. Cabrera sabía qué botas iba a calzar.
“Las cosas que me alejan de ti” para ese año de 1970 de plena dictadura militar obtuvo la más alta votación del jurado en el festival al ser interpretada por el artista venezolano. El criollo fue acompañado de una orquesta integrada por 28 músicos bajo los arreglos del pianista y director argentino Buby Levecchia.
“Cuando comienzo con la canción empieza a organizarse una reacción de gente moviéndose, inquieta, para dar paso a una explosión, una ovación extraordinaria que se me paran los pelos cuando yo veo esto. Era el milagro de esa canción y el milagro de un pueblo musical”, recordó Héctor en una entrevista radial al locutor e investigador Henrique Bolívar Navas.
Las cosas que me alejan de ti
Triunfalmente regresaría a Venezuela y volvería a Argentina donde residió unos cuantos años. Fue amado en el país austral, realmente admirado como lo fue en Venezuela, Cuba, Colombia, en el Caribe, en México, y muchas naciones más en las que participó en películas, grabaciones, eventos y dio a Venezuela muchas alegrías y galardones.
Héctor Cabrera sucumbió en Caracas, a un cáncer de próstata el 6 de junio del 2003 a la edad de 71 años. Cambió de paisaje en la misma ciudad que le viera nacer .
Su país le recuerda, agradecido. Siempre le llamará “El Poeta de la Canción”, como le bautizó. Se guarda en la memoria aquella histórica participación en Argentina que de alguna manera visibilizó los dolores de aquella nación, en ese entonces.
Autor: teleSUR - Lil Rodríguez