Brasil y Estados Unidos son las naciones que registran más muertes con armas de fuego en el mundo, de acuerdo con el estudio Global Mortality from Firearms, realizado entre 1990 y 2016. 

El gigante suramericano aparece de primero en la lista con un total de 43.200 muertes, seguido de Estados Unidos con 37.200 muertes. 

El estudio realizado por el Institute for Health Metrics and Evaluation revela que entre 1980 al 2016 el número de homicidios por armas de fuego subió de 40 por ciento al 70 por ciento. 

Asimismo, el estudio revela que las muertes por armas de fuego en los países son más elevadas que las ocurridas por conflictos y terrorismo en todos los años, menos en 1994, cuando ocurrió el genocidio de Ruanda. 

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Pese a estos índices de mortalidad en Brasil, el presidente electo, Jair Bolsonaro, pretende emitir un decreto que garantice el porte de armas a las personas sin antecedentes penales. 

Esta disposición del ultraderechista dejaría sin efecto la Ley Federal del Estatuto del Desarme, que fue aprobada en 2003 en la nación suramericana y ratificada por el expresidente Luiz Inacio Lula da Silva. 

De acuerdo con el investigador David Marques, del Foro Brasileño de Seguridad Pública, los homicidios en ese país podrían aumentar hasta en un 12 por ciento. 

Entretanto, Estados Unidos sigue siendo escenario frecuente de tiroteos, y este año 2018 registró un récord de estos ataques en centros educativos, mientras que los Gobiernos se niegan a ceder a un control de armas. 

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