El presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció recientemente su intención de retirar a 7.000 de los 14.000 soldados que permanecen en Afganistán durante los próximos meses. De igual manera, decidió la salida de sus tropas ilegales en Siria, tras de siete años de guerra en la nación.

Estas polémicas decisiones reducen considerablemente la presencia de EE.UU. en el Medio Oriente, lugar del que ha buscado apoderarse históricamente ante los intereses económicos, comerciales, geopolíticos entre otros que mantiene.

Sin embargo, pese al retiro de tropas en dos de los focos más importantes de la región, la nación norteamericana mantiene su presencia en varios países de Oriente Medio. Oficialmente, cuenta con más de 54.000 soldados en 12 países de la zona.

Irak: La presencia de EE.UU. en Irak se traduce en más de 5.000 soldados que permanecen en el territorio, fuertemente implicados en los acontecimientos militares de la nación.

Kuwait: Hay más de 15.000 soldados en bases militares que responden a los intereses de EE.UU., lo que representa la cifra más alta de la región. 

Qatar: El bloque ejercido por la coalición saudita contra Qatar no impide que sea el bastión en el que reside la mayor base de EE.UU. en el Medio Oriente. Cerca de 10.000 soldados permanecen en el recinto militar.

Bahrein: Es reconocida por albergar la base militar más antigua de EE.UU. (1995). En ella radican 7.000 soldados estadounidenses.

Jordania: EE.UU. envió alrededor de 1.500 soldados a Jordania, aliado importante de la nación norteamericana que no forma parte de la OTAN en el Medio Oriente desde 1996. En 2012, según informes, la CIA también entrenó a terroristas del grupo autodenominado Estado Islámico (Daesh, en árabe) en Jordania para desestabilizar al Gobierno sirio.

Emiratos Árabes Unidos: Cuenta con más de 5.000 soldados desplegados en uno de los puntos claves para los intereses norteamericanos.

>> Así reaccionan los afganos tras retiro de tropas de EE.UU.