La complicidad del presidente estadounidense, Joe Biden, con los crímenes sionistas ha generado llamados de indignación y protestas en el Colegio Morehouse en Atlanta, Georgia, y la Universidad de Columbia en Nueva York.

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En el Colegio Morehouse, donde se gradúo Martin Luther King Jr., numerosos profesionales egresados han reclamado la cancelación de la invitación a Biden para discursar en la ceremonia de graduación el 19 de mayo, debido a su respaldo a la guerra genocida en la Franja de Gaza.

En la Universidad de Columbia, la presidenta Niamh Shevick enfrenta críticas por reprimir a manifestantes pro Palestina y por socavar la libertad académica durante las protestas. El Comité de supervisión del centro ha cuestionado su decisión de convocar a la policía para dispersar a los manifestantes.

Más de 100 personas fueron arrestadas la semana pasada en las protestas contra la barbarie israelí y el apoyo de la Casa Blanca. 

La administración de Columbia ha anunciado la formación de un equipo de trabajo para abordar las preocupaciones planteadas por el consejo universitario y restaurar la calma en el campus.

Las protestas y la represión se han extendido a nivel internacional, con reclamos en Australia, Francia, Gran Bretaña y otros países. 

En Túnez, la Unión General de Estudiantes ha convocado a marchas en solidaridad con los movimientos estudiantiles en EE. UU. y Europa, mientras que el Movimiento de Estudiantes Libres en Líbano ha llamado a una revuelta solidaria en apoyo a Palestina y al pueblo de Gaza.