El Consejo Electoral Provisional (CEP) de Haití suspendió nuevamente las elecciones presidenciales para escoger al sucesor de Michel Martelly. La decisión responde a la crisis política que vive el país desde la primera cita comicial realizada el 25 de octubre de 2015.

Para el presidente del CEP,  Leopold Berlanger, es casi imposible realizar elecciones en medio del panorama político que vive el pueblo haitiano. “No se puede hablar de calendario electoral en la fase en la que nos encontramos”, insistió el funcionario durante una rueda de prensa celebrada este miércoles en Puerto Príncipe (capital). 

Recalcó que el CEP es la única institución responsable de fijar las fechas de elecciones en el país. “Somos una institución independiente encuadrada en la constitución y la ley electoral”, dijo Berlanger tras referirse a la ilegalidad de acuerdos suscritos entre partidos políticos.  

A su juicio, las divisiones que existen en el seno de la clase política atentan contra el orden constitucional que demandan los haitianos. 

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En la segunda vuelta presidencial, los haitianos votarían por el oficialista Jovenel Moise, quien obtuvo en la primera cita comicial del 25 de octubre de 2015, 32,76 por ciento de los votos, o apoyarían al opositor Jude Celestin que logró 25,29 por ciento de los votos, que más tarde rechazó participar por presunto fraude electoral. 

En febrero de este año unos 15 partidos de oposición propusieron un acuerdo para solucionar la crisis política en Haití tras la salida del expresidente Michel Martelly. Entre las propuestas figura la necesidad de alcanzar un consenso entre todos los sectores de la sociedad haitiana para conformar un nuevo Gobierno.