Rusia llama a preservar los acuerdos sobre Siria en la ONU
El canciller ruso ratificó el compromiso de la comunidad internacional para luchar contra el terrorismo en Siria.
El canciller ruso Serguéi Lavrov hizo un llamado este viernes desde la 71° sesión de las Naciones Unidas, a luchar contra el terrorismo en Siria.
Lavrov recalcó la necesidad de mantener vivos los acuerdos alcanzados entre su país y Estados Unidos sobre Siria. También subrayó la importancia de separar a los grupos terroristas de la oposición para que un cese al fuego pueda tener éxito.
"Ahora es esencial evitar la destrucción de estos acuerdos", dijo Lavrov, quien reconoció que el reciente bombardeo estadounidense sobre tropas sirias y el ataque registrado contra un convoy humanitario de la ONU socavan esos entendimientos
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"Gracias a la asistencia militar en Siria se hizo posible prevenir la desintegración del Estado y del país bajo el poder de los terroristas, nuestro compromiso como grupo internacional es mantener un proceso que podría definir el devenir político de ese país".
Respeto al derecho de las naciones
La crisis en Oriente Medio es un ejemplo que muestra a qué lleva "la arrogancia y la fe en lo impecable de la acción propia" y "las decisiones unilaterales e imprudentes para resolver los conflictos más complejos", lamentó Lavrov. La consecuencia, advirtió el canciller ruso, es "el fracaso del fundamento de la estabilidad mundial".
"Ha llegado la hora de aprender las lecciones y no dejar a Siria avanzar hacia la catástrofe", afirmó, y recordó el papel beneficioso que jugó la operación militar rusa en este país, que permitió evitar su descomposición bajo la ofensiva de terroristas. Esta permitió evitar la descomposición siria por la ofensiva de los terroristas.
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En contexto
El presidente sirio rechazó recientemente las acusaciones de que aviones sirios o rusos atacaron un convoy de ayuda humanitaria en las cercanías de Alepo (sur), en la localidad siria de Urm al Kubra, el pasado 19 de septiembre. Asimismo, negó que sus tropas impiden la llegada de comida a la zona de la ciudad controlada por los rebeldes.