La maña sigilosa del expresidente panameño Ricardo Martinelli no logró mantener bajo perfil en la arremetida, a través del uso de equipos adquiridos en Israel entre 2009 y 2014, con dos empresas: M.L.M. Protection Ltd. Y NSO Group.

El afán por controlar la privacidad de cada ciudadano trascendió en el uso de equipos a distancia para acceder a la información registrada en celulares, escuchar las conversaciones, plagiar fotos, revisar los correos electrónicos y replicar la lista de contactos, informó el sitio web de La Prensa.

La Fiscalía Auxiliar de la República, estuvo encargada de investigar el caso y a los exdirectores del Consejo de Seguridad Gustavo Pérez y Alejandro Garuz, ambos con arresto preventivo.

En el reportaje explican el proceso de vigilancia por parte del exmandatario vinculado en el desfalco de dinero del Estado panameño, pues el decoro no primó a la hora de activar el celular del perjudicado, tomar fotografías para determinar en qué lugar se encontraban, hasta grabar el audio.

Se calcula que el Gobierno del expresidente Ricardo Martinelli contrató por 13.5 millones de dólares a la M.L.M. Para adquirir un equipo para interceptar las comunicaciones. En la investigación de La Prensa revelan que el negocio ilegal se logró a través del Programa de Ayuda Nacional (PAN), qué por cierto nunca se discutió bajo el artículo 67 de la Ley 22 de Contrataciones Públicos de ese país caentroamericano.

Una de las víctimas espionaje fue el hermano del presidente Juan Carlos Varela, José Luis Varela que entra en la lista de los 150 espiados, en el que se pudo comprobar grabaciones de conversaciones personales con su esposa.

Por ahora se espera por la decisión de la Corte Suprema de Justicia acerca de una solicitud de la Fiscalía II Anticorrupción para levantar el fuero parlamentario a Martinelli otorgado por el Parlamento Centroamericano.

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