La policía de Austria interceptó en Viena (capital) a un camión que transportaba a 24 refugiados afganos, quienes viajaban en la sección de carga y al parecer procedían de Hungría.

Según las autoridades, las personas que viajaban en el transporte de carga eran adolescentes y jóvenes (16-20 años) e iban amontonadas en una estrecha área que no les permitía la ventilación, además de que las ventanas y la puerta estaban selladas.

"Era como una celda de la prisión sobre ruedas, estaban hacinados, sentados y de pie, uno sobre otro. No habrían llegado lejos”, detalló el portavoz de la policía, Thomas Keiblinger.

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Medios locales indicaron que el hallazgo fue realizado en horas de la noche del martes, durante los operativos que realizan los cuerpos de seguridad desde el pasado domingo por un tiempo indefinido a fin de intentar controlar todos los vehículos que se dediquen al tráfico de personas.

Dicho operativo fue lanzado por el Ministerio del Interior luego de que descubrieran un frigorífico con 71 cadáveres de refugiados procedentes también de Hungría. El caso desató aún más polémica sobre la crisis de refugiados que se registra en todo el continente Europeo.

En este nuevo caso, en el que pudieron salvar la vida de los refugiados, la policía indicó que el conductor del camión intentó huir pero fue alcanzado a unos metros por un perro entrenado. El hombre tiene 30 años de edad y es de nacionalidad rumana.

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