Un refugiado se prendió fuego en el campamento de Idomeni en Grecia y sus compañeros lograron ponerlo a salvo. El hecho se produce mientras reina el caos y la incertidumbre, tras la puesta en marcha del plan de la Unión Europea y Turquía para "disminuir" el flujo de refugiados hacia las islas griegas y las fronteras siguen cerradas. 

La información fue confirmada por la Policía de Macedonia Central. Por su parte, el corresponsal de teleSUR en Grecia, Hibai Arbide, indicó que este hecho es una muestra de desesperación máxima, ante un continente que se ha hecho el sordo y no quiere responder a las solicitudes de los refugiados. 

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El hombre, que fue transportado en mantas hasta una ambulancia, participaba en una protesta que desde este lunes mantienen los refugiados con el bloqueo de las vías del tren. La exigencia es que se reabra la frontera. 

Después de lo ocurrido, más personas se sumaron a la manifestación. Éstas se han multiplicado, no solo en Idomeni, sino también en el puerto del Pireo, donde hay cerca de 5 mil personas en pabellones y tiendas de campaña. 

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En contexto: 

Datos publicados por el centro de gestión del Gobierno griego detallan que durante el primer día de entrada en vigor del acuerdo entre la UE y Ankara llegaron al país un total de 875 refugiados.

El Gobierno griego inició el traslado de refugiados desde las islas a territorio continental, para despejar los centros de registro. Desde el domingo, los recién llegados tendrán que decidir si solicitan asilo a Grecia o son devueltos a territorio turco.

Cada caso deberá ser analizado de forma individual, por lo que los primeros traslados podrían tardarse unas dos semanas.