La ola de calor en Pakistán, ha cobrado la vida de 1.306 personas, principalmente en la provincia paquistaní de Sindh, en el sur del país. Según fuentes médicas citadas por el periódico paquistaní Dawn. 

Según funcionarios locales la culpa de las muertes la tiene la compañía energética K-Electric, debido a un corte de electricidad que afectó a toda la ciudad de Karachi. 

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 La mayoría de estas muertes tuvieron lugar en Karachi, la ciudad más grande del país con unos 20 millones de habitantes. Aunque el miércoles las temperaturas comenzaron a bajar, en ese territorio alcanzaron los 45 grados centígrados.  

"El balance de muertos supera los 1.000 y podría ascender hasta los 2.500" dijo Anwar Kazmi, un portavoz de la Fundación Edhi, una organización líder en asistencia médica de urgencia en Karachi.

Después de que se alcanzaran temperaturas superiores a los 40ºC, la brisa marina y las nubes cubren esta ciudad portuaria desde hace un par de días, dando un respiro a sus habitantes.

La Fundación Edhi dijo que sus morgues en la ciudad han recibido tal llegada de cuerpos que están teniendo dificultades para mantenerlos correctamente refrigerados. Las familias de las víctimas también han tenido problemas para enterrar a sus fallecidos, pues los sepultureros tenían que trabajar a un ritmo incesante bajo el sol inclemente. 

Las autoridades sanitarias recomiendan a los residentes que eviten la exposición prolongada al sol y que lleven ropa de algodón.