El Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, pidió este sábado a varios países investigar las acusaciones sobre abusos cometidos por sus soldados desplegados en la República Centroafricana.

"Estas serias alegaciones son extremadamente inquietantes. Las personas en la República Centroafricana estaban desesperadas por ser protegidas, señaló Zeid.

En un comunicado, Zeid recordó la gran cantidad de denuncias sobre abusos cometidos por soldados, incluso cascos azules, como violaciones, asesinatos de civiles, ejecuciones sumarias, raptos y explotación sexual de mujeres.

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El Alto Comisionado de la ONU dijo que "es incuestionable que las fuerzas internacionales salvaron vidas, pero en algunos casos los protectores se convirtieron en predadores".

La petición de Zeid se da tras la denuncia del trabajador humanitario sueco de la ONU, Anders Kompass, sobre abusos sexuales a niños cometidos por efectivos de paz franceses en la República Centroafricana. Kompass entregó un informe confidencial a las autoridades francesas y a la prensa debido a la ineficacia de la ONU para detener los abusos.

Este caso hizo sonar las alarmas y sacó a la luz otras alegaciones de soldados de distintas nacionalidades que también formaban parte de la Misión de la ONU en ese país (MISCA) y habrían cometido varios crímenes.

"Algunos países han investigado y sancionado algunos soldados, pero el hecho de que un número de contingentes internacionales hayan estado implicados en si mismo es un hecho de mucha preocupación", dijo Zeid.

El Alto Comisionado señaló que está enviando un equipo a la República Centroafricana para que investigue sobre el terreno.

Caso de soldados franceses

Con el título “Abuso sexual a niños por las Fuerzas Armadas Internacionales” y con el sello de "confidencial" en todas las páginas, el informe revelado por Anders Kompass detalla la violación y sodomía a niños pequeños por las tropas de paz francesas, entre diciembre de 2013 y junio de 2014 mientras éstos estaban en un centro para desplazados internos en Bangui, capital de la República Centroafricana.

El diario británico The Guardian envió el informe a la codirectora del grupo de defensa de Ayudas Free World, Paula Donovan quien demandó una comisión independiente para investigar el manejo de la ONU de los casos de abuso sexual cometidos por las fuerzas de paz.

Los niños, algunos huérfanos, describen en el informe cómo fueron explotados sexualmente a cambio de comida y dinero. Un menor de 11 años de edad dijo que fue abusado cuando acudió a ellos por comida.

Mientras que otro niño de 9 años describió que él y su amigo fueron abusados por soldados franceses en el campamento para refugiados cuando fueron a un punto de control en busca de comida. El reporte indica que tras el asalto el menor huyó aterrorizado del campamento.