EE.UU.: Policía de Los Ángeles mata a hombre sin techo
Varios agentes de la Policía de Los Ángeles, estado de California (sur de EE.UU.), mataron el domingo a un hombre en situación de calle, tras forcejear con él para que se quedara en el suelo.
El hecho fue publicado en vídeo a través de varias redes sociales; en el mismo se puede observar a los agentes disparar contra el individuo a quemarropa.
De acuerdo con el oficial de la Policía, Jack Richter, citado por la agencia RusiaToday, los agentes dispararon al hombre desarmado en respuesta a una llamada que recibieron por un supuesto altercado entre dos personas.
En el vídeo se puede ver cómo los agentes tratan de acostar al hombre por la fuerza en Skid Row, una zona central de la ciudad donde duerme gran cantidad de personas sin hogar; y una mujer se lleva la porra de uno de ellos y éste la siguió gritando "¡Tienes mi porra! (herramienta de uso oficial)".
Entre tanto cuatro oficiales intentan acorralar en el suelo al hombre sin techo y tras varios intentos, uno de los policías abrió fuego contra el individuo, sin cruzarle palabra. En la grabación se escuchan al menos cinco disparos, señala RT.
La Policía no ofreció detalles del número total de agentes que forcejeaban con el hombre, declarado muerto horas después en un hospital. Mientras, comisionaron a un grupo de oficiales a investigar las causas del hecho.
Algunos testigos dijeron a los medios que la víctima era conocida en la zona central como “África” y según lo que explicó Dennis Horne, el sujeto estaba peleando con alguien en su tienda de campaña cuando llegó la policía.
Como “África” se negó a salir de la carpa, los agentes usaron un arma paralizante contra él y luego lo arrestaron. Los oficiales pusieron al hombre contra el suelo, pero siguió luchando hasta su muerte, añadió Horne.
Anthony Blackburn
El historial de asesinatos de personas desarmadas a manos de oficiales estadounidenses sigue aumentado, “África” se suma a la lista de personas indefensas que mueren a manos de la Policía.
En diciembre del año pasado, agentes de la policía de Los Ángeles propinaron tres disparos al joven afrodescendiente Ezell Ford, quien estaba desarmado.
Según un informe forense, Ford, de 25 años de edad, recibió disparos en la espalda, brazo y abdomen. Además, se descubrió una marca de cañón en la espalda, lo que sugirió que el disparo ocurrió a una corta distancia.
Un final parecido tuvo el joven Akai Gurley, el pasado 20 de noviembre cuando fue asesinado a quema ropa por una agente de la policía de Nueva York. A la lista se sumó también, el afroamericano, Eric Garner, a quien otro oficial asesinó por asfixia en la ciudad de Nueva York, en julio de 2014.
Este hecho desató multitudinarias protestas bajo la consigna “I can’t breathe” (no puedo respirar), las últimas palabras de Garner antes de morir. La justicia de EE.UU. dejó impune su caso y las protestas no surtieron efecto en la Administración de Barack Obama, que aún no se interesa por acabar con la discriminación en el país.
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El caso más reciente es el del mexicano Antonio Zambrano-Montes, de 35 años, quien habría recibido siete disparos de parte de la policía en Washington (capital).
Zambrano, nativo del estado de Michoacán (suroeste de México), fue perseguido por agentes policiales estadounidenses y tiroteado en las adyacencias de un centro agrario, hecho que fue presenciado y filmado por varios testigos.
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