Cuba es una nación que se ha caracterizado por mantener con fortaleza un proyecto revolucionario, pese a las políticas genocidas del gobierno de Estados Unidos (EE.UU.).

El corresponsal de teleSUR en Cuba, Alien Fernández, expresó que aunque el acercamiento entre la isla y el país norteamericano es positivo, las huellas del dolor por tantos años de agresiones contra los ciudadanos cubanos son imborrables.

Betina Palenzuela, una cubana entrevistada por el reportero, relató que su madre fue una de las víctimas de la explosión de una bomba de alto poder destructivo en la embajada de Cuba en Portugal, en el año 1976.

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El artefacto que le robó la vida a su progenitora, fue apenas una muestra de las acciones promovidas por Norteamérica para causar dolor en la población revolucionaria.

"Ese día cinco niños quedamos huérfanos (...) cinco niños que oscilábamos entre los 4 años y los 12 años de edad, quedamos huérfanos (...) Yo era la mayor de esos niños, tenía 12 años, y vivir durante 39 años con este dolor es bastante duro", relató Palenzuela.

Estos hechos fueron evidenciados por el mundo a través de los medios de comunicación durante años, a la par que se difundieron pretextos por los cuales, durante más de 30 años, Cuba permaneció en la lista de países patrocinadores de terrorismo.

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El acercamiento entre ambas naciones ha permitido que las visitas de estadounidenses a la isla se incrementen y que estos puedan conocer por cuenta propia el criterio de esta población.

Jonh Kt, un turista entrevistado por Fernández, dijo sentirse seguro durante su estancia. "Me he alejado de las zonas turísticas para visitar otras localidades y nunca me he sentido extraño, probablemente sí luzco como turista, porque siempre llevo la cámara, pero siempre me han recibido bien", expresó para demostrar que los ciudadanos en esta nación no son terroristas.

Es conocido que Cuba posee cinco hombres que ostentan el reconocimiento de "héroes" por haber prevenido desde EE.UU. acciones violentas contra la isla.

Uno de ellos, Gerardo  Hernández, manifestó que sabe de muchas personas en el mundo que consideran la lucha antiterrorista de su país, pese a que esto jamás fue reconocido por el Gobierno norteamericano.