Los ministros de Relaciones Exteriores y representantes de los países miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), se comprometieron a denunciar los planes desestabilizadores del capitalismo globalizado y del imperialismo contra gobiernos progresistas de la región latinoamericana y caribeña.

En este sentido, rechazaron las acciones desestabilizadoras que realizan sectores de derecha de Brasil y Ecuador contra los gobiernos legítimos de Dilma Rousseff y Rafael Correa, respectivamente.

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El pronunciamiento se dio en la declaración final emitida tras la reunión del Consejo Político realizada este lunes en Caracas, capital de Venezuela, en la cual también reafirmaron “la necesidad de fortalecer la unidad continental, la concertación y la integración regional, para hacer frente a estas amenazas”.

Asimismo, los miembros del ALBA-TCP aseguraron que defenderán la “soberanía, la libre determinación y el desarrollo de nuestros pueblos, basados en los principios de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz”, que fue firmada en la II Cumbre de la CELAC en La Habana (Cuba).

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Solidaridad con Ecuador y Brasil

Los representantes del ALBA-TCP, en su declaración final, manifestaron su respaldo al Gobierno del presidente ecuatoriano Rafael Correa ante los intentos desestabilizadores de la derecha, y a la vez, instan a participar en la acción internacional de apoyo a esa nación que se realizará el 13 de agosto.

“Respaldar al legítimo gobierno del Presidente Rafael Correa, y rechazar los intentos de la derecha ecuatoriana e internacional, que buscan desestabilizar y frustrar los cambios políticos democráticos, institucionales y económicos en marcha gracias a la Revolución Ciudadana”, reza la declaración final.

Asimismo, en el texto hacen “un llamado a respaldar y activar acciones de solidaridad internacional el venidero 13 de agosto en apoyo al gobierno del Presidente Rafael Correa frente a las acciones que incluyen protestas callejeras y desinformación mediática”.

En cuanto a Brasil,  expresaron su rechazo a “los planes desestabilizadores de grupos opositores y medios de comunicación que pretenden atentar contra gobiernos democráticos” como el de esa nación. Por este motivo, hicieron un llamado a que “todos los sectores políticos, económicos y sociales de dicho país sostengan un diálogo constructivo que parta del legítimo respeto a la institucionalidad”.

Abogan por diálogo entre Venezuela y Guyana 

En la declaración final del Consejo Político del ALBA-TCP, se expresa el apoyo al “diálogo diplomático conforme al Derecho Internacional” entre Venezuela y Guyana “para propiciar una solución pacífica de la controversia conforme al Acuerdo de Ginebra de 1966”.

En este sentido, en el texto se condena “los factores exógenos que pretenden generar escenarios de conflicto entre las hermanas República Bolivariana de Venezuela y República Cooperativa de Guyana”, con el fin de alterar la paz en la región y afectar el desarrollo de mecanismos de integración como Petrocaribe y CELAC.

En este contexto, también reiteraron su rechazo a la orden ejecutiva del pasado 9 de marzo del Gobierno de Estados Unidos contra Venezuela, la cual calificaron como “una acción injerencista que pretende lesionar la soberanía de esa nación suramericana.  Por tanto, exigieron “la derogación inmediata” de esa orden.

En la declaración final el ALBA-TCP también condenaron “la política y medidas migratorias impuesta por EE.UU en contra de El Salvador, Guatemala y Honduras “por ser violatorias de DD.HH. fundamentales”.

En el caso de Argentina, ratificaron su apoyo y acompañamiento al Gobierno de Cristina Fernández “en su lucha contra los Fondos Buitres como práctica especulativa e injerencista del capitalismo financiero transnacional”.

También se unieron al reclamo internacional para que EE.UU. levante de forma inmediata el bloqueo  económico, financiero y comercial contra Cuba.