El Consejo de Derechos Humanos de Rusia envió a organismos internacionales documentos que, según afirma, contienen evidencias de la ejecución de prisioneros rusos por parte de las Fuerzas Armadas de Ucrania.

En este sentido, el objetivo de Moscú es denunciar lo que considera crímenes cometidos por las fuerzas ucranianas y los batallones nacionalistas contra civiles y militares rusos.

Entre las acusaciones se encuentran las supuestas ejecuciones de soldados rusos mientras estaban en cautiverio.

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La reciente denuncia acusa a Kiev de perpetrar presuntos crímenes ocurridos entre el 1 de enero y el 31 de marzo de este año en las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, así como en la región rusa de Briansk.

Desde 2022, el Consejo de Derechos Humanos de Rusia distribuye informes periódicos a aproximadamente 2.000 destinatarios, incluyendo embajadas, políticos, periodistas y defensores de derechos humanos en el extranjero.

Asimismo, Rusia lleva a cabo una operación militar especial en Ucrania desde el 24 de febrero de 2022. Por su parte, el presidente ruso, Vladímir Putin, ha declarado que los objetivos de esta operación son proteger a la población de un genocidio por parte del régimen de Kiev y mitigar los riesgos para la seguridad nacional derivados del avance de la OTAN hacia el este.

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