El Frente nacional de Transportistas de Carga Pesada en Perú y otros gremios vinculados a este sector protagonizaron este miércoles un paro indefinido para exigir la derogación de las leyes que favorecen al crimen organizado.

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Asimismo, piden que el Gobierno peruano aplique medidas para combatir el aumento de las extorsiones, la delincuencia, el sicariato y la corrupción que viven los ciudadanos en el país andino.

Agregado a esto, los transportistas cuestionan la precarización de las condiciones laborales, las bajas remuneraciones entregadas a los pensionistas, el abandono de la agricultura familiar y las leyes de amnistía que exoneran de responsabilidad a los policías y militares que cometieron violaciones a los DD.HH.

De acuerdo al corresponsal de teleSUR, Ramiro Angulo, este gremio nacional representa a 80.000 transportistas pertenecientes a los 24 departamentos del Perú.

Se prevé que el paro impacte en las actividades de comercialización y distribución de alimentos en Lima, ya que los manifestantes abandonaron sus puestos de trabajo para la movilización desde tempranas horas de este miércoles.

Sin embargo, cabe destacar que se trata de un paro de transporte parcial, ya que algunos gremios de conductores afines al Congreso de la República y al Gobierno señalaron que mantendrán con normalidad sus actividades laborales.

Por otra parte, la medida cuenta con el respaldo de varios gremios, como la Asociación de Mujeres Empresarias de Gamarra, Asotrani (Asociación de Transportistas Nacional e Internacional), la Alianza Nacional de Transportistas y el Frente Nacional de Carga Pesada.

Según medios locales, debido al paro convocado por los gremios de transportistas, el general Enrique Felipe Monroy, jefe de la Región Policial Lima, anunció que más de 10.500 agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP) fueron desplegados en distintos puntos de la capital desde horas de la madrugada.

Este paro nacional representa una ola de desconfianza de la población trabajadora peruana con respecto a las labores de las autoridades en el país, ya que se les cuestiona que gobiernan a favor de unos pocos empresarios que, aumentando así las brechas de económicas, sociales y culturales con los sectores populares.    

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