Medios iraníes informaron que los misiles balísticos lanzados por las Fuerzas Armadas persas alcanzaron objetivos en ciudades como Tel Aviv, Haifa y Ascalón.

Según la Guardia Revolucionaria, esta «operación ofensiva combinada» tuvo como objetivo, entre otras, emplazamientos de armas, instalaciones de producción de combustible de aviación y centros de suministro de energía del régimen sionista, para lo cual utilizaron una «multitud de drones y misiles» a velocidad hipersónica.

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Fueron golpeadas áreas de Tel Aviv, la ciudad portuaria de Haifa y la base área de Nevatim, donde la ocupación sionista basa aviones F-35 que emplea para masacrar a la población de Gaza y bombardear a Irán.

Asimismo, misiles iraníes golpearon el aeropuerto internacional Ben Gurion y se reporta gran destrucción en Kiryat Gat debido al ataque realizado en defensa propia.

Proyectiles disparados por Irán impactaron, además, la fábrica de armas Rafael, que produce vehículos militares blindados, vehículos de combate robóticos y una gama de armamento que ha masacrado a miles de palestinos.

Aunque las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) adelantaron que hacían esfuerzos para neutralizar los cohetes, imágenes y videos difundidos a través de las redes mostraron cómo el sistema Cúpula de Hierro y el sistema antimisiles THAAD de Estados Unidos no lograron interceptar numerosos misiles.

Se reporta que desde bases militares estadounidenses en Jordania -donde Washington tiene a miles de soldados en una veintena de emplazamientos- se trató de derribarlos, pero los intentos fueron infructuosos.

Irán recalcó que no desea la guerra, pero dejó claro que defenderá su soberanía y que endurecerá sus ataques si Tel Aviv insiste en mantener la agresión.

Esta oleada de ataques son parte de la Operación Promesa Verdadera 3, desplegada por Irán luego de los ataques israelíes desde el viernes pasado a la fecha, que dejaron en la nación persa un saldo de al menos 128 iraníes fallecidos, en su mayoría mujeres y niños, y cerca de 1.000 heridos.

Tras otro ataque de Irán, más temprano, medios israelíes confirmaron que los misiles y drones iraníes dañaron infraestructuras críticas e instalaciones militares. La Compañía de Refinerías de Petróleo de Israel (IORC) informó que sus oleoductos y líneas de transporte en Haifa resultaron dañados por los misiles y se reportó que la central eléctrica de Hadera también fue objetivo. Irán declaró que utilizó misiles avanzados de mediano alcance, como Badr, Keibar Shekan y Emad.

Las operaciones ofensivas de las Fuerzas Armadas de la República Islámica de Irán, según un comunicado, «seguirán siendo más violentas y generalizadas si continúan las atrocidades y los ataques». El sistema de defensa aeroespacial del CGRI, por su parte, afirmó haber interceptado y destruido tres misiles de crucero, diez drones y decenas de pequeñas aeronaves del ejército israelí en las zonas de conflicto dentro de Irán. Este intercambio de ataques subraya una escalada significativa en el conflicto regional.

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