La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA) informó este viernes que se mantienen activas las labores de asistencia para apoyar a las familias de los 29 estudiantes fallecidos en un centro educativo de la República Centroafricana, tras una estampida originada por la explosión de un transformador eléctrico.

LEA TAMBIÉN

Explosión en República Centroafricana deja al menos diez estudiantes muertos

Según un comunicado de la OCHA, “los actores humanitarios siguen movilizados junto al Gobierno para proporcionar más medicamentos y alimentos, y para evaluar rápidamente otras necesidades, en particular apoyo psicológico para las familias afectadas y otros tipos de asistencia necesarios”.

El accidente ocurrió el miércoles en el Liceo Barthélemy Boganda de Bangui (capital, al centro sur del país), donde más de 5.000 alumnos se encontraban rindiendo sus exámenes de bachillerato.

Una falla eléctrica interrumpió el suministro de energía y, al momento de la reconexión, el transformador colapsó, lo que provocó una explosión y que muchos estudiantes huyeran por los pasillos e incluso algunos se arrojaron desde ventanas del primer piso, creyendo que estaban bajo ataque.

Entre los fallecidos se encuentra el director del establecimiento, René Mandji, quien perdió la vida el jueves tras sufrir un paro cardíaco atribuido a las consecuencias del evento.

El representante de OCHA en el país, Mohamed Ag Ayoya, destacó la respuesta inmediata de las autoridades y de organizaciones internacionales, como la misión de la ONU en el país (MINUSCA). «Gracias a su intervención rápida, se logró evitar una catástrofe mayor», expresó.

Durante una visita oficial en Bruselas, el presidente centroafricano, Faustin-Archange Touadéra, lamentó lo ocurrido y decretó tres días de luto nacional a partir del jueves. Asimismo, prometió que el Estado se hará cargo de los costos médicos y de apoyo para los afectados.

Por su parte, el director del Hospital Universitario Comunitario, Dr. Abel Assaye, dio a conocer que su equipo atendió a un gran número de heridos, algunos en estado crítico. «Lamentamos 15 muertos, entre ellos 12 niñas y 3 varones, de los cuales 3 eran adolescentes embarazadas”.

Las otras 14 muertes fueron reportadas por el Hospital Nacional Universitario, la ONG Médicos Sin Fronteras y el centro médico Maman Domitien.

EN ESTA NOTA: