El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva (Partido de los Trabajadores, PT) presentó un malestar este lunes y fue trasladado a la unidad del Hospital Sirio-Libanés en Brasilia, donde se le realizaron exámenes y se llegó a la conclusión de que sufrió un episodio de vértigo. Con posterioridad, abandonó el centro asistencial.

Según el comunicado de los galenos, este contratiempo se debió a un cuadro de laberintitis, descrita en la literatura médica como una hinchazón de la parte interna del oído. Los análisis de imagen y de sangre practicados a Lula están dentro de la normalidad. Se le indicó guardar reposo.

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En febrero pasado el jefe de Estado se practicó sus chequeos médicos anuales. Su médico personal, Roberto Kalil Filho, confirmó en aquel momento que estos arrojaron resultados normales y que su estado de salud era óptimo.

De acuerdo con la Presidencia de la República, el mandatario se encuentra en el Palacio de la Alvorada (residencia oficial), donde guarda reposo a lo largo de este día. Las reuniones previstas en su agenda para la tarde del lunes fueron canceladas.

En diciembre pasado el Presidente brasileño, de 79 años, se sometió a una cirugía de emergencia para drenar un hematoma intracraneal después de sufrir dolores de cabeza.

Un año antes, en septiembre de 2023, se le practicó una artroplastia total de la cadera derecha, proceder quirúrgico para reemplazar, con una prótesis, el cartílago desgastado en esa región del cuerpo. Cuando el procedimiento se completó, después de un año, pasó por exámenes de revisión.

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