Alrededor de 4.000 personas de 80 países viajaron a El Cairo con la intención de llegar a la frontera de Rafah con Gaza y romper el bloqueo humanitario. Sin embargo, el copresidente y portavoz de la marcha, el español de origen palestino Saif Abukeshek, fue detenido el lunes 16 de junio y deportado el martes 17 de junio, llegando a Roma por la noche. La organización denunció la escalada de detenciones ilegales, abusos y malos tratos contra los participantes, a pesar de haber coordinado con las autoridades egipcias y de haber anunciado el fin de las acciones planificadas en Egipto.

La organización detalló que agentes de paisano sacaron por la fuerza a participantes de hoteles, cafés y calles sin identificación ni explicación. En un incidente particularmente grave, el lunes 16 de junio por la tarde, la policía secreta secuestró a cinco personas, incluyendo a Saif Abukeshek y a los noruegos Jonas Selhi y Huthayfa Abuserriya, mientras se encontraban en una cafetería. A los tres los vendaron, esposaron, interrogaron y golpearon brutalmente, según denunció Selhi tras su liberación.

LEA TAMBIÉN:

En imágenes: Marcha Global en solidaridad con Palestina

Abukeshek logró salir de Egipto rumbo a Barcelona, mientras que Jonas y Huthayfa fueron trasladados al centro de detención del aeropuerto de El Cairo sin cargos formales, a la espera de su liberación. La organización urgió a la comunidad internacional contactar a las embajadas egipcias para exigir la liberación de los detenidos y el regreso seguro de quienes intentan salir pacíficamente del país.

La suspensión de la marcha en Egipto se produjo después de que la organización enviara una nota de prensa el lunes 16 de junio por la tarde, asegurando que la etapa en el país había terminado y solicitando a todos los participantes que regresaran a sus países. Pese a esta decisión, las autoridades egipcias intensificaron la represión. La jueza Pilar Barroso, participante de la marcha y miembro de Jueces por Palestina, indicó que el nivel de seguridad en Egipto aumentó drásticamente debido a la situación geopolítica y que resultaba «imposible hacer nada más aquí sin riesgo de cárcel». La organización estima que alrededor de trescientas personas han sido deportadas, 14 de ellas de la delegación española.

LEA TAMBIÉN:

Egipto deporta más de 170 activistas de la Marcha Global a Gaza

Activistas denunciaron la inacción de sus embajadas, incluida la española, que según testimonios no ofrecieron la asistencia esperada ante las detenciones y el hostigamiento. La diputada de Sumar, Tesh Sidi, criticó la respuesta de la Embajada española en El Cairo, que según ella solo ofreció atención por agresiones sin mayor mediación. No obstante, la delegación española afirmó que la atención consular fue correcta y que se personaron donde estaban las detenidas en varios casos.

A pesar de la represión, la organización reiteró que sus objetivos coinciden con los diplomáticos de Egipto de poner fin al asedio ilegal de Israel y lograr un alto el fuego permanente en Gaza. Consideran la represión «innecesaria y contraproducente» para Egipto. Abukeshek, antes de su detención, y Pilar Barrado enfatizaron que la «principal preocupación sigue siendo la población de Gaza» y que, a pesar de la violencia y las intimidaciones, el movimiento se ha fortalecido. Afirmaron que la Marcha Global a Gaza «no ha terminado, apenas comienza», y que explorarán incansablemente vías para poner fin a las atrocidades en Palestina y promover la vida, dignidad y autodeterminación de los palestinos.

EN ESTA NOTA: