Tensión en Armenia: Feligreses enfrentan a la policía para proteger a un arzobispo
Fuerzas especiales intentaron detener a un influyente clérigo en medio del creciente conflicto entre el gobierno del primer ministro Nikol Pashinián y la Iglesia apostólica.
Agentes de la policía a las afueras de la sede religiosa de Echmiadzin, diócesis del obispo principal de la Iglesia Apostólica Armenia. Foto TASS
27 de junio de 2025 Hora: 13:51
Una fuerte operación policial sacudió este viernes 27 de junio a la Iglesia Apostólica Armenia cuando agentes de élite irrumpieron en la sede espiritual de la ciudad de Etchmiadzin, en un intento de detener al arzobispo Mikael Ajapahian, figura prominente del clero y crítico del Gobierno.
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La intervención desató enfrentamientos entre las fuerzas del orden y feligreses que rodeaban la Iglesia para impedir el arresto del obispo, acusado por las autoridades de incitación a derrocar el orden constitucional y menoscabar la soberanía del país.
Según medios locales, el patriarca supremo Gareguin II —máxima autoridad de la Iglesia Apostólica Armenia— salió personalmente al encuentro de los uniformados, algunos de ellos con el rostro cubierto. Finalmente, Ajapahian no fue detenido en el lugar y regresó a las instalaciones junto al líder religioso.
el arzobispo Mikael Ajapahian.
Horas después, la Iglesia confirmó que el arzobispo comparecerá voluntariamente ante el Comité de Investigación, pese a no haber recibido una notificación oficial previa. El arzobispo Nathan Hovannisian, portavoz del Patriarcado, llamó a los fieles a “no ceder ante provocaciones” y a defender a la Iglesia “por todos los medios legales”.
El Ministerio de Justicia abrió un proceso penal contra quienes impidieron la operación, mientras la tensión entre el Gobierno del primer ministro Nikol Pashinián y la Iglesia se recrudece. La confrontación tiene raíces políticas y simbólicas: el patriarca Gareguin II ha pedido en reiteradas ocasiones la renuncia del premier, quien recientemente propuso reformar la forma de elección del líder eclesiástico, planteando un rol determinante del Estado.
En paralelo, el empresario Samvel Karapetián, cercano a sectores religiosos, fue detenido la semana pasada por “incitar a la toma del poder”. Su arresto alimentó aún más las denuncias de persecución religiosa y judicial.
La crisis entre el Ejecutivo y la Iglesia Apostólica Armenia —una de las más antiguas del cristianismo— amenaza con erosionar aún más la estabilidad interna de un país ya marcado por tensiones con Azerbaiyán y profundas divisiones políticas.
Autor: TeleSUR-ah-
Fuente: Agencias,
