El Consejo de Ministros de España aprobó este martes el proyecto de ley de Memoria Democrática (sustituye al término de Memoria Histórica) y la dejó lista para ser enviada al Congreso de los Diputados en el más breve espacio de tiempo, dijo en rueda de prensa desde el Palacio de la Moncloa la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo.

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El proyecto de ley es una de las principales propuestas del Gobierno de coalición entre el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y Unidas Podemos (UP), presidido por Pedro Sánchez (PSOE) desde enero último. El proyecto pretende sustituir a la Ley de Memoria Histórica aprobada en 2007 bajo el gobierno del también socialista José Luis Rodríguez Zapatero (2004-2011).

En la rueda de prensa de presentación del proyecto legislativo, a cargo de Calvo, se puntualizaron los aspectos esenciales que pretende la normativa, bajo la premisa del "¡Nunca más!" en relación con los crímenes derivados de la Guerra Civil (1936-1939) y la dictadura franquista (1939-1978).

El proyecto de ley prevé declarar la ilegitimidad de los tribunales investidos en el franquismo, así como la nulidad de pleno derecho de las sentencias y resoluciones de ellos derivados. De igual manera, el Estado español iniciará de oficio la apertura de fosas comunes, así como procederá a la creación de una Fiscalía especial sobre los crímenes del franquismo para ventilar estos "indicios" de delito.

Una medida de especial trascendencia es la de revocación de títulos nobiliarios y medallas policiales y militares contrarios a la "democracia", el primero de los cuales será el propio "ducado de Franco", la supresión de la Orden Imperial del Yugo y las Flechas, así como la ilegalización de la Fundación Francisco Franco y de otras que hagan "apología del franquismo".

El Valle de los Caídos (el sitio donde están enterradas más de 37.000 víctimas de la Guerra Civil, y del cual fueron exhumados tras decreto los restos de Franco hace un año) será considerado un "lugar de memoria democrática", con una resignificación de su función y la prohibición expresa de actos de exaltación de la sublevación militar de 1936.

De igual manera se hará un reconocimiento especial al papel de las mujeres, así como otros grupos represaliados durante la tiranía franquista, lo cual incluye al pueblo gitano, la comunidad homosexual, aunque no los comunistas.

Por último, la norma prevé la declaración del 31 de octubre como Día de Recuerdo y Homenaje a Todas las Víctimas (en esa fecha, en 1978 se aprobó la actual Constitución del Reino de España) y la del 8 de mayo como Día de Recuerdo y Homenaje a las Víctimas del Exilio, que es la fecha que en Europa occidental se recuerda la victoria soviética sobre el nazismo en 1945.

El proyecto, ahora pasará al Congreso de los Diputados, en el cual el Gobierno de coalición espera sacarla adelante con los apoyos de la investidura de enero pasado. El mismo enfrenta la oposición de toda la plana de VOX (extrema derecha) y, en alguno aspectos, del Partido Popular (derecha).