El Gobierno de Portugal declaró este viernes el estado de alerta para los días 21, 22 y 23 de agosto ante el arribo de una nueva ola de calor que puede elevar el riesgo de incendios forestales en el país.

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El ministro de Administración Interna, José Luis Carneiro, anunció en conferencia de prensa que el estado de alerta supone el nivel más bajo de respuesta a catástrofes.

La medida impondrá el cumplimiento de normas a partir del próximo domingo, como limitaciones en el uso de maquinarias en los trabajos agrícolas y el acceso restringido de personas a zonas forestales.

El ministro indicó que la mayor parte de los incendios en Portugal se originan durante el desarrollo de trabajos vinculados a la agricultura, o como consecuencia de negligencias en el uso del fuego.

“Combatir los incendios es una prioridad, teniendo en cuenta que se acentuaron en las últimas tres semanas”, refirió Carneiro, y acotó que, hasta el momento, la proporción de siniestros intencionados entre los meses de julio y agosto de 2022 se ha duplicado hasta el 26 por ciento.

Además, el funcionario habló sobre posibilidad de contratar a más de 500 bomberos para reforzar los servicios de emergencia que brinda Protección Civil, e intensificar las acciones de vigilancia con 25 patrullas de las Fuerzas Armadas.

La presente etapa estival ha sido calificada por las autoridades de Portugal como una de las peores ante la ocurrencia de incendios forestales, como el generado el pasado 6 de agosto en el parque natural de la Sierra de la Estrella, que provocó la pérdida de más de 20.000 hectáreas de tierra, equivalente al 30 por ciento de su superficie.

Datos recientes del Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera (IPMA) indican que, en los últimos meses, el 55,2 por ciento del país vive una sequía severa, mientras que en el 44,8 por ciento es extrema.