Los representantes de la oposición en Nicaragua abandonaron este lunes las mesas de diálogo por la paz, que había sido reanudadas el pasado viernes luego que le presidente Daniel Ortega presentara sus propuestas.

Tras anunciar su abandono a las mesas de diálogo, la alianza opositora exigió la presencia de representantes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Corte Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) y de la Unión Europea (UE).

Durante la mesa de diálogo desarrollada el pasado viernes, el Gobierno de Nicaragua reiteró el llamado a la oposición a la paz y al cese a los tranques y hechos violentos.

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Grupos vinculados a la oposición nicaragüense han desarrollado una serie de ataques y saqueos contra instituciones del Estado y medios de comunicación, sumados a focos de protestas violentas en algunas ciudades de la nación.

Los hechos violentos han dejado decenas de muertos y cientos de heridos, además de múltiples daños materiales a instituciones públicas y privadas.

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Violencia contra ciudadanos nicaragüenses   

LA vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, denunció este lunes el ataque realizado contra la vivienda de la mamá de un diputado y el secuestro a otros miembros de sus familiares, quienes fueron liberados horas más tardes luego de las gestiones del monseñor Bosco Vivas.

Otros de los casos de violencia reportados fue el saqueo e incendio a la vivienda de la diputada sandinista Rosa Argentina Solís, realizado por unos encapuchados.

Además de otros ciudadanos nicaragüense que sufren de los tanques, pese a que en la mesa de diálogo del pasado viernes se acordara un plan para  la remoción de los tranques.