El Ministerio de Hacienda y Crédito Público de Nicaragua informó que los actos vandálicos registrados desde abril han dejado más de 182 millones de dólares de costos económicos por los daños a bienes e instalaciones públicas.

Mediante un informe, el ministro de Hacienda, Iván Acosta indicó que la ola de violencia no solo ha causado daños en las infraestructuras de 78 municipios, sino también ha afectado el desarrollo económico del país con la paralización de algunas industrias, como en el caso de los puertos que han perdido más de 400.000 dólares por la poca afluencia de turistas y la suspensión de las importaciones.

"Realmente la economía en 2017 había tenido un desempeño excelente en términos de macroestructura, sector pecuario y sector turismo (...) antes del 17 de abril de 2018 Nicaragua era el tercer país que más crecía del continente, indicó Acosta.

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Asimismo, explicó que antes de que los grupos de encapuchados tomarán las calles, la nómina de trabajadores era mayor a la actual y el crecimiento económico era progresivo (4.5 por ciento).

“Hoy estamos diciendo que la economía no crece. Hay una pérdida real de 200.000 empleos, lo cual impactará en la seguridad social, impactará en el comercio, la demanda doméstica y crecimiento real de la actividad”, agregó.

Acosta explicó que el turismo se ha visto gravemente afectado, casi el 80 de las actividades turísticas se encuentran paralizadas lo que ha dejado a más del 70 por ciento de las personas dedicadas a este oficio sin empleo en tan solo dos meses. 

Finalmente señaló que es necesario recuperar la paz de la nación en el marco de las Mesas de Diálogo impulsadas por el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega con el objetivo reactivar las actividades productivas y estabilizar la economía.