Más de 500 organizaciones civiles y defensoras de Derechos Humanos de Myanmar solicitaron el jueves a la ONU una reunión del Consejo de Seguridad para abordar la ola de ataques por parte del Ejército en el estado Chin.

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"Hacemos un llamamiento al Consejo de Seguridad de la ONU para que adopte una resolución que llame urgentemente a una reunión sobre la escalada de ataques en el estado Chin, y abordar el rápido deterioro humanitario, de derechos humanos y político de la crisis en Birmania",  indica el comunicado suscrito por la menos 521 organizaciones.

Los firmantes reclaman una resolución de la ONU para poner fin a las hostilidades por parte del Ejército en el estado del noroeste de Myanmar y la imposición de un embargo de armas a la junta militar, en el poder desde el golpe de Estado del 1 de febrero.

"La junta ha continuado su asalto violento y desplegado tropas e incrementado sus ataques contra civiles en el estado Chin y las regiones de Sagaing y Magwe", denunciaron las organizaciones.

En el texto, los firmantes recuerdan que el pasado 29 de octubre el Ejército bombardeó un pueblo en el estado Chin, con artefactos incendiarios que provocaron la destrucción por el fuego de 200 viviendas y dos iglesias.

De acuerdo a la Asociación para la Asistencia de Presos Políticos de Birmania, las fuerzas militares quemaron en el mes de octubre unas 400 viviendas, táctica que recuerda a la empleada por los militares contra miembros de la comunidad rohinyá.

Organizaciones de DD.HH. indicaron que desde el golpe de Estado hace nueve meses, la represión militar ha causado 1.241 muertos.