Al menos 200 ciudadanos solicitantes de asilo, entre ellos varios guatemaltecos, fueron abandonados a su suerte por las autoridades del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE, por su sigla en inglés), en Texas.

En plena época navideña, los migrantes fueron dejados en autobuses en la estación de Greyhound y en parques sin dinero, comida, agua y demás insumos.

Activistas señalan que las personas están "siendo soltadas en la calle" para que resuelvan qué hacer y a dónde se dirigen, sin darle ninguna posibilidad de seguridad o resguardo por parte del Estado.

Denunciaron las acciones de la ICE y han calificado la medida como "irresponsable" e "insensible", porque temen que estos ciudadanos deban dormir en las calles por no contar con las condiciones económicas para sostenerse.

Ante esta abrupta realidad, pobladores decidieron ayudarlos dándoles comida, agua, frutas, pero solicitan atención del Gobierno de Estados Unidos para que tengan un lugar seguro para resguardarse.

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