Familiares de los diez indígenas yaqui desaparecidos hace dos meses en el norte de México, identificaron el miércoles objetos personales de sus parientes hallados en fosas clandestinas en el estado de Sonora.

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Según información de la Fiscalía General del Estado de Sonora, los objetos, presuntamente de las víctimas, fueron encontrados entre restos óseos localizados el lunes pasado en un rancho del municipio de Cajeme,  después de un enfrentamiento entre agentes y presuntos sicarios.

Los familiares de los indígenas desaparecidos solicitaron una reunión con la fiscal general del estado de Sonora, Claudia Indira Contreras, para conocer sobre los avances de las investigaciones en la búsqueda de los hombres que permanecen desaparecidos desde el 14 de junio y del hallazgo de restos óseos reportados el pasado lunes.

La fiscal informó a los deudos que se localizaron los restos óseos de seis cuerpos, así como tres armas pertenecientes a la Guardia Tradicional de la etnia yaqui y dos vehículos propiedad de los desaparecidos.

Durante la conversación con la fiscal, los familiares solicitaron tener acceso a las pertenencias de las víctimas como prendas de vestir, cintos, hebillas, cuerdas y pulseras de hilo en color rojo.

La fiscal Contreras expuso que aún cuando los denunciantes identificaron las prendas de los desaparecidos, la dependencia esperará hasta el próximo sábado los resultados de las pruebas de ADN para "dar certeza científica de que efectivamente se trate de los integrantes de la etnia".

Según versiones de los familiares, los 10 miembros de la etnia yaqui salieron a buscar alimentos y bebidas para amenizar las fiestas tradicionales de la Virgen del Carmen que se celebran del 14 al 16 de julio.

Pero de acuerdo con su testimonio, a su regreso los yaqui fueron sorprendidos por un grupo de hombres armados, que los subieron por la fuerza a sus camionetas, dejaron varios objetos personales y todo lo que traían tirado como rastro.