El número de cadáveres encontrados en terrenos utilizados por una secta cristiana en una zona boscosa de Shakahola (norte), condado de Kilifi, en Kenia, ascendió a 226 este miércoles, informó la comisionada regional de la costa, Rhoda Onyancha.

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La funcionaria declaró a la prensa que, "después del ejercicio de hoy, se exhumaron 14 cuerpos y se encontró uno en el bosque"."

Hubo una persona rescatada hoy del bosque en la operación de búsqueda y rescate en curso", lo que eleva el número de víctimas rescatadas a 85, precisó Onyancha, citada por medios locales.

El total de sospechosos detenidos se mantiene en 31, mientras el número de personas reportadas como desaparecidas hasta el momento sigue siendo de 610.

Casi todos los muertos de la llamada "masacre de Shakahola" han sido exhumados de tumbas y fosas comunes halladas en el bosque de ese nombre, a excepción de unos pocos que murieron en el hospital debido a su estado grave.

Este martes se reanudó la segunda fase de la operación de rescate pausada el domingo, después de una semana en la que la cifra de fallecidos no dejó de ascender conforme se avanzaba la excavación.

Las autopsias de más de un centenar de cuerpos evidencian signos de inanición, pero también los cadáveres de al menos tres menores y un adulto presentan muestras de estrangulación y asfixia. Por otro lado, las primeras investigaciones de la Policía apuntan a que los fieles eran forzados a seguir con el ayuno aunque quisieran abandonarlo.

Entre los detenidos se encuentra el extaxista Paul Nthenge Mackenzie, "pastor" de la Iglesia Internacional de la Buena Nueva, que incitaba a sus adeptos a privarse de comida para "encontrar a Jesús". Hace una semana, el tribunal de Shanzu, en la ciudad costera de Mombasa, ordenó extender durante 30 días (iniciando el recuento el pasado 3 de mayo) su encarcelación junto con su mujer y otros 16 sospechosos.