Autoridades españolas confirmaron este miércoles que el incendio en que se desató el pasado martes en la noche en Tenerife, en Islas Canarias, ha arrasado ya con más de 800 hectáreas.

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Los municipios de Arafo y Candelaria, en el norte de la isla, son los más afectados, y ha obligado a alrededor de 150 efectivos terrestres y 14 aéreos a combatir el fuego, así como a desplegarse en la zona a 60 integrantes de distintos cuerpos policiales y de seguridad, 40 de Cruz Roja y del Servicio de Urgencias Canario.

De igual manera, el fuego está afectando las zonas limítrofes en Santa Úrsula y La Victoria, en el norte de la isla. Por su parte, el cabildo de Tenerife ha solicitado la declaración del nivel dos de gravedad.

Entre tanto, se ha movilizado un batallón de la Unidad Militar de Emergencias (UME), con 50 efectivos, al tiempo que las autoridades regionales han solicitado al Gobierno de España movilizar otros medios en caso de que fuera necesario.

Asimismo, confirmaron que, por el momento, no se ha registrado ninguna persona fallecida ni herida, aunque sí se ha dispuesto la evacuación con carácter preventivo porque la zona es de difícil acceso, situación que puede propagar más el incendio.

Fueron evacuados desde el martes los habitantes de Arrate, Chivisaya, Media Montaña y Ajafona, mientras que durante la mañana del miércoles se realizó la misma operación en la parte alta de la zona de Igueste de Candelaria.

La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias emitió diversas medidas para prevenir los efectos nocivos de la inhalación del fuego, entre ellas, evitar salir al exterior y cerrar puertas y ventanas de las viviendas y centros con personal.