El Gobierno francés anunció que no aumentará el precio de los combustibles en el país debido a las presiones que han ejercido los llamados "chalecos amarillos"(grupo de manifestantes independientes) a través de las diversas manifestaciones en las calles de París.

"El Gobierno está listo para el diálogo y lo está demostrando porque este aumento de los impuestos se ha eliminado del proyecto de ley de presupuesto para el 2019", aseguró este miércoles el primer ministro, Édouard Philippe ante el Parlamento francés.

Con el fin de calmar las protestas en las calles, el presidente Emmanuel Macron ya había anunciado este martes la suspensión por seis meses de la propuesta para aumentar los precios del combustible para el 2019, sin embargo, este miércoles el Gobierno decidió suspenderla definitivamente.

De igual forma, se tomó la decisión de congelar los precios de los servicios de gas y de electricidad, otras de las exigencias de los manifestantes.

Otras de las reivindicaciones que exigían los chalecos amarillos era el restablecimiento del impuesto a la fortuna, tributo que pagan aquellos que poseen un patrimonio igual o superior a 1.3 millones de euros y que fue suspendido en 2018 con el fin de captar más inversionistas en el país; sin embargo, el presidente Macron se mantuvo firme ante esta exigencia y decidió mantener la suspensión.

Aunque estos aumentos no figurarán en el proyecto de ley de presupuesto, existe la posibilidad para que sean incluidos durante el curso del 2019 en una actualización del presupuesto.

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