El doble rasero de la política migratoria de EE.UU.
El presidente Trump criminaliza a los migrantes centroamericanos y al mismo tiempo externa preocupación por los migrantes venezolanos.
El Gobierno de Estados Unidos (EE.UU.) al parecer ejerce un doble rasero en el tema migratorio, pues coloca en un lado “bueno” la migración de venezolanos y en un compartimento “malo” a los migrantes centroamericanos que buscan ingresar al territorio norteamericano, de acuerdo con analistas.
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En los últimos meses la administración del presidente estadounidense Donald Trump ha dispuesto de millones de dólares para atender las “necesidades humanitarias” de los migrantes venezolanos, que están sobre todo afincados en comunidades fronterizas colombianas. Y al mismo tiempo, demanda al Congreso fondos para construir un muro en su frontera con México, que impida el paso de los migrantes centroamericanos, a quienes criminaliza.
Trump y el cinismo
Para el analista argentino Marco Teruggi, lo mínimo que se puede decir es que Trump exuda “cinismo”.
Esto porque presiona para lograr conseguir el financiamiento para el muro fronterizo con México, militariza la frontera y criminaliza a los migrantes de origen centroamericano.
“Luego se muestra preocupado por quienes se van de Venezuela”, escribió Teruggi en un reciente tuit.
El mandatario estadounidense, en un tuit que publicó en 2018, afirmó que los migrantes centroamericanos que intentan llegar a EE.UU. son “muy malos” y no son personas, sino animales.
Pence y el doble rasero
En septiembre de 2018, el vicepresidente estadounidense Mike Pence anunció un nuevo paquete de “ayuda humanitaria” de 48 millones de dólares dirigido a los refugiados venezolanos.
Pence recordó ayer martes su reciente visita a la frontera de Colombia con Venezuela y dijo que no la va a olvidar debido a la “crítica” situación de los migrantes venezolanos. "Son historias que el mundo tiene que conocer", dijo.
También ayer, se dio a conocer que un total de 700 migrantes, originarios de Centroamérica, fueron arrestados por agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, en lo que fue la detención con mayor número de migrantes registrada en el actual año fiscal.
El pasado fin de semana agentes fronterizos detuvieron a mil 500 migrantes más en diversos operativos.
El Gobierno de EE.UU. ha utilizado a los migrantes venezolanos para afirmar que en la nación suramericana se vive una supuesta crisis humanitaria, con el fin de propiciar una acción armada en territorio venezolano, situación que ha sido denunciada por el presidente venezolano Nicolás Maduro.