¿Qué debes saber sobre las elecciones en Uruguay?
Este 27 de octubre los uruguayos acuden a las urnas electorales para elegir entre dos modelos políticos, con la continuidad del Frente Amplio o el regreso de la derecha.
Las elecciones presidenciales y parlamentarias de Uruguay se celebran este 27 de octubre, una jornada en la que deciden si mantienen el rumbo hacia la izquierda o regresan al pasado con la derecha.
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Los uruguayos deben decidir quién será el sucesor de Tavaré Vázquez, médico y político, de 79 años de edad, miembro del Frente Amplio (FA).
Hasta el momento de la votación, el partido oficialista, con 14 años en el poder, se mantuvo con un respaldo de cerca del 40 por ciento, con su candidato Daniel Martínez.
El próximo presidente de Uruguay asumirá su cargo el 1 de marzo de 2020 y tendrá un mandato que durará cinco años.
¿Qué se elige?
Los uruguayos elegirán presidente, vicepresidente, 90 diputados, 30 senadores.
Para que resulte electo un mandatario, deberá obtener el 50 por ciento más uno de los sufragios, de lo contrario, se realizará una segunda vuelta el 24 de noviembre entre los dos candidatos más votados.
Además, los uruguayos votarán si cambiar (o no) algunos puntos clave de la actual Constitución.
El plebiscito sobre la reforma llamada "Vivir sin Miedo" busca, entre otros asuntos, permitir que los militares estén en las calles para atacar la delincuencia, con allanamientos nocturnos, así como negar la libertad anticipada a prisioneros culpables de algunos delitos y la pena de reclusión permanente revisable.
¿Cuántos están llamados a votar?
Un total de 2.699.847 personas están convocadas a las urnas electorales, de acuerdo con la información difundida por la Corte Electoral. Hay en el país 7.122 circuitos, cerca del doble que en 2014.
Para saber el sitio de votación, la Corte Electoral puso a disposición una forma en línea con los planes circuitales de cada uno de los departamentos.
— Corte Electoral (@Corte_Electoral) October 16, 2019
El voto en Uruguay es obligatorio, ya que se plantea no solo como un derecho sino como un deber. Podrán participar todos los inscritos en el Registro Cívico Nacional, mayores de 18 años de edad o que los cumplan para la fecha de los comicios.
Para votar, los uruguayos deben presentar su Credencial Cívica o pronunciar su número y serie de Credencial ante la mesa de votación.
¿Quienes son los principales candidatos presidenciales?
Hay 11 partidos que se disputan la Presidencia de Uruguay: Frente Amplio, Partido Nacional, Partido Colorado, Cabildo Abierto, Partido de la Gente, Unidad Popular, Partido Verde Animalista, Partido Ecologista Radical Intransigente, Partido Independiente, Partido Digital y Partido de los Trabajadores.
Los candidatos con mayor intención de voto son Daniel Martínez (FA) y Luis Lacalle (PN), ambos podrían pasar a una eventual segunda vuelta. El tercer lugar es disputado por Enerto Talvi (PC) y Guido Manini Ríos (CA).
El @Frente_Amplio nació del sueño de hombres y mujeres que sintieron la necesidad de que juntos cambiábamos la historia.
— Ing. Daniel Martínez (@Dmartinez_uy) October 24, 2019
La política es para la gente y no la gente para los políticos. pic.twitter.com/eYMad2etRa
Nos hemos preocupado por sembrar acuerdos, unión, porque entendimos que va a ser necesario convocar a otros partidos para gobernar en favor de la vida de los uruguayos, tomando decisiones firmes y con coraje #esahora pic.twitter.com/OGkeommXsE
— Luis Lacalle Pou (@LuisLacallePou) October 23, 2019
Para consultar los programas de Gobierno de los candidatos puede revisar el material publicado en la página oficial de la Corte Electoral.
¿Cuál es el contexto comicial?
La elección parece polarizarse entre dos grandes proyectos, uno de izquierda liderado por el Frente amplio que propone continuar la línea económica de los últimos quince años y que ha tenido logros evidentes reconocidos por múltiples organismos internacionales.
El otro lo representan el bloque de derecha, liderado por el Partido Nacional, que propone realizar un ajuste fiscal de 1.000 millones de dólares para lo que deberá desmontar muchas de las políticas sociales impulsadas en los últimos tiempos.
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