El presidente argentino, Mauricio Macri, declaró este viernes emergencia hídrica en varias regiones del país, tras las intensas lluvias que han causado inundaciones en al menos cinco provincias de la nación.

Macri firmó el Decreto N° 67/19, mediante el cual declara el estado de emergencia hídrica, por 180 días en aquellas zonas del noroeste y el Litoral de nuestro país, afectadas por las inundaciones, y que serán determinadas por el Consejo Nacional para la Gestión Integral del Riesgo y la Protección Civil.

Las provincias más afectadas por este fenómenos climatológico han sido Corrientes (noreste), Entre Ríos (este), Chaco (norte) y Santa Fe (centro) y Santiago del Estero (norte), de las cuales han sido evacuados más de 7.600 personas, según datos del Sistema Nacional de Gestión Integral del Riesgo (Sinagir). 

Inundaciones, caídas de árboles, techos e incluso carteles publicitarios, son algunas de las consecuencias que han dejado las tormentas.

"La magnitud y extraordinariedad de los acontecimientos requieren que todas las áreas del Gobierno Nacional aúnen esfuerzos para brindar soluciones inmediatas y efectivas para amortiguar el impacto de los mismos en el ámbito social, económico y productivo. Las acciones deben abarcar todo lo necesario para enfrentar la situación y paliar sus efectos negativos sobre los habitantes y sus bienes, como así también de las unidades productivas", dice la orden.

El mandatario argentino solicitó al Ministerio de Producción y Trabajo y al Banco de la Nación Argentina que concreten las medidas necesarias para que se preserve la "continuidad de la actividad productiva y la conservación de los puestos de trabajo de los sectores afectados".

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