Para reivindicar a las víctimas refugiadas de Siria, Somalia y los rohingyas, una minoría musulmana perseguida en Myanmar y Bangladesh; la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) sugirió este lunes “una cadena mundial de solidaridad” y enfrentar el “genocidio pasivo”, informó la agencia Andes.

A través de un comunicado la Unasur se indicó que "la condición de los migrantes rohingyas provenientes de Myanmar y Bangladesh, abandonados a su suerte en medio del mar sin poder desembarcar en un puerto de algún país que los reciba, sumada a los refugiados de Siria y Somalia, constituye un auténtico genocidio pasivo por parte de un mundo cada día más insensible al sufrimiento del género humano.

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La cadena mundial "agenciada por la Cruz Roja Internacional, a través de la cual todos los países del mundo se comprometan a hacer aportes para que los países de origen – cuando existan condiciones de permanencia – o de destino de todos los migrantes forzados, puedan asumir sus responsabilidades humanitarias", agregó el organismo internacional.

De esta manera la Unasur consideró que "se abrirían espacios económicos y sociales para que estos millones de ciudadanos a la deriva puedan encontrar un sitio seguro en el cual establecerse o del cual desplazarse con sus familias".

Se calcula que el pasado viernes unos 712 migrantes provenientes de Bangladesh y Myanmar fueron rescatados, luego de naufragara su barco, por pescadores en las costas de la provincia de Aceh al noroeste de Indonesia. La embarcación se encontraba a la deriva durante dos meses.

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