El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, aplaudió este miércoles las alianzas que han contribuido a la solución de los conflictos internos en América Latina y a convertir a la región en una zona de paz. 

“En América Latina y el Caribe los conflicto internos se han resuelto y es una zona pacífica”, dijo. 

Al inaugurar en Bruselas la II Cumbre entre la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la Unión Europea (UE), el dirigente del bloque comunitario resaltó que la relación entre ambas regiones se ha fortalecido. 

América Latina y Europa tienen más cosas unificadoras que aquellas que las separan, expresó durante su alocución el alto funcionario europeo, quien manifestó su confianza en que los acuerdos a alcanzar en esta cita beneficien a ambos bloques y a sus respectivos pueblos, “para que la sociedad viva en sostenibilidad”.

Destacó que las dos áreas han creado acuerdos bilaterales y regionales, y ahora el enfoque es aumentar las alianzas económicas.

Seguidamente, aseguró que “juntos podemos abordar retos como modificar la estructura, generar empleo de calidad y proteger el medio ambiente. También queremos promover la seguridad y el bienestar de los ciudadanos”.

La máxima autoridad del Consejo Europeo consideró que la cooperación entre regiones es algo que “debe hacerse”, y con vistas a ellos es preciso definir estrategias para crear alianzas más ambiciosas en temas como el cambio climático.

“Tenemos que proteger nuestros valores comunes y regionales, tenemos que continuar promoviendo la democracia y el Estado de derecho”, indicó.

“La Celac no es solo un grupo de países, sino que abarca una visión ambiciosa  de la unidad de América Latina y el Caribe”, finalizó.

Apoyo a la paz en la región 

Tusk agregó que otro de los ejes en los que deben unir esfuerzos es en la contribución y el apoyo para alcanzar la paz en Colombia y para acabar con el bloqueo económico que ha impuesto Estados Unidos a Cuba durante más de 50 años.

En relación con esto, aseveró que la UE está decidida a concluir la negociación de su primer acuerdo bilateral con Cuba, y afirmó que espera la normalización de las relaciones entre el país caribeño y Estados Unidos, así como "el fin del embargo" estadounidense.

"Apoyamos el proceso de modernización de Cuba y estamos comprometidos con concluir nuestras negociaciones de un acuerdo de diálogo político y cooperación".

De igual manera, resaltó el proceso de Diálogos de Paz que se lleva a cabo en La Habana, entre el Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, con el cual se aspira poner fin al conflicto armado que reina en la nación suramericana desde hace más de medio siglo.

Por su parte, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, mencionó que esta cumbre es una oportunidad para reflexionar sobre los retos que tiene cada país, lo que han logrado y lo que tienen por hacer en el futuro.

“Hemos de sumar nuestras fuerzas para fijar una nuevas agendas de desarrollo, juntos podemos cambiar las cosas a la hora de luchar contra el problema de la droga en todo el mundo”, recalcó Juncker, quien indicó que lo que necesitan es seguir siendo ambiciosos, especialmente a la hora de afrontar los retos globales.