El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB por su sigla en ruso) informó que más de 220 personas con potencial terrorista se encuentran bajo el control operacional de la Federación de ese país.

La información fue destacada este miércoles en la apertura de la 15ª reunión de jefes de los servicios especiales, los servicios de seguridad y las fuerzas del orden de Rusia.

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Allí, el director del FSB, Alexánder Bortnikov, advirtió que existe una tendencia creciente por parte de los terroristas suicidas a protagonizar "acciones sonadas".

Agregó que los empleados del FSB llevan a cabo un trabajo sistemático para identificar a las personas involucradas en la preparación de las llamadas “bombas vivas” y otro tipo de ataques terroristas.

Bortnikov manifestó que los rusos y los ciudadanos de los países vecinos del Asia Central que participan en los conflictos armados en Siria, Irak y Afganistán integrados a los terroristas representan un gran peligro para la seguridad de Rusia. 

"El peligro de un estallido de la actividad terrorista como consecuencia de la vuelta masiva de guerrilleros es uno de los problemas más acuciantes para Rusia, al igual que para la mayoría de los países de todo el mundo", dijo.

Bortnikov también comentó que los terroristas han utilizado eficazmente el tema de los refugiados para realizar sus planes criminales en Europa en los últimos años.

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"No es ningún secreto que el crecimiento explosivo en el número de inmigrantes procedentes de Oriente Medio y el Norte de África desestabiliza la situación socio-política y empeorar dramáticamente la delincuencia en muchos países, aumenta en gran medida el alcance de la labor operativa de los servicios especiales y los organismos encargados de hacer cumplir la ley, hace que el trabajo para nosotros en un modo especial ", destacó el director de la FSB.