Servicios públicos en Atenas, Grecia, se ven afectados por las huelgas contra el paquete de reformas de ley acordado entre el Gobierno y los acreedores de ese país, cuyo debate inicia este viernes en el Parlamento.

Las protestas han generado problemas con el transporte en la capital griega, así como el funcionamiento mínimo de los hospitales y barcos bloqueados en los muelles. Además, empleados de la construcción detuvieron sus actividades.

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La aprobación de estos paquetes de reformas forman parte de las medidas previas para que los acreedores acepten, el próximo 22 de enero, el desembolso de unos 4.500 millones de euros.

Entre las medidas tomadas están el endurecimiento de las condiciones para la convocatoria de huelgas a nivel local, la realización de ejecuciones hipotecarias y las reformas de los subsidios familiares.

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La ministra de trabajo, Efi Ajtsioglu, explicó el jueves que el nuevo reglamento para las convocatorias a huelgas solo está dirigido a los sindicatos locales y empresariales que conforman la federación, y que los paros podrán ser convocados con una mayoría de votos simples.

Las huelgas deberán contar con la participación del 50 por ciento más uno de los asociados activos, y no con el 20 por ciento como estaba establecido.

Otras de las medidas que ha generado malestar entre los griegos es la que busca instaurar un sistema electrónico para las ejecuciones hipotecarias, pues este método sustituirá por completa las subastas presenciales en los tribunales.

Las reformas forman parte de la penúltima evaluación del programa de asistencia financiera antes de que el país deje el rescate en agosto próximo.