"Voy a quemar las Naciones Unidas si voy a EE.UU.", amenazó el presidente de Filipinas Rodrigo Duterte tras la petición de abrirle una investigación hecha por un alto comisionado del organismo internacional.

El mandatario, quien formuló la amenaza durante un discurso en una base militar en la ciudad de Zambonga, en el sur filipino, respondió a la iniciativa de investigar los crímenes cometidos por su persona en los años ochenta.

Igualmente, Duterte carga sobre sus hombros una cantidad importante de críticas sobre la violenta campaña contra las drogas que inició cuando tomó posesión en junio. Desde entonces Duterte es responsable de la muerte de unas 6 mil 100 personas.

Defensores de los Derechos Humanos critican la licencia para matar otorgada por Duterte a la Policía filipina. 

"No me hables como si fuera tu empleado. Soy Estado miembro. Eres solo un empleado de una oficina cuyo subsidio procede del bolsillo de los Estados miembros y no tienes autoridad para pavonearte por ahí como si fueras soberano. ¡idiota!", le espetó el presidente filipino al alto comisionado de la ONU para los DD.HH., Zeid Ra'ad Al Husein, quien pidió investigarlo. 

El presidente de la Comisión Filipina para los Derechos Humanos, Jose Gascon, anunció el pasado sábado la formación de un equipo de investigación sobre los presuntos asesinatos cometidos por el presidente filipino. 

Duterte es conocido por su lenguaje soez y reaccionario, también por haber ofendido al papa y al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, entre otros.