El 8 de noviembre Estados Unidos elegirá al sucesor de Barack Obama al frente del Gobierno estadounidense, la campaña electoral ha estado centrada en los candidatos de los partidos demócrata y republicano, Hillary Clinton y Donald Trump respectivamente. 

El actual escenario electoral de EE.UU. muestra el desencanto por la clase política y los cuestionamientos hacia Trump y Clinton han hecho que millones de estadounidenses volteen la mirada a los candidatos alternativos de los “terceros partidos” (los que en otras elecciones han ocupado el tercer lugar, debajo de los demócratas y los republicanos).

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No es que alguno de estos partidos tenga la oportunidad de llegar a la Casa Blanca, sino que sus potenciales votantes podrían perjudicar a los principales candidatos y detonar una inesperada sorpresa al final del 8 de noviembre.

Los candidatos alternativos

De acuerdo a una encuesta de la empresa Real Clear Politics, a finales de septiembre el 15 por ciento de los estadounidenses tenía entre sus planes votar por algún candidato que distinto a Hillary Clinton o Donald Trump.

A pesar de que estos partidos tienen el 0.1 por ciento de probabilidad de ganar las elecciones del 2016, uno de los datos más llamativos que han surgido en esta contienda es que casi un 30 por ciento de los jóvenes entre 18 y 29 años manifestaron en las encuestas que votarían por un tercer partido, y muchos de estos votos vienen de personas que en algún momento sintonizaron con algún candidato partido principal.

El profesor de administración política en la Universidad de George Washington, Michael Cornfield dijo al New York Post “Hay un ambiente fértil en el electorado por candidatos de terceros partidos porque hay un sentimiento de aversión hacia Trump y Clinton que ha alcanzado niveles muy altos”

Gary Johnson

Según el sondeo de Real Clear Politics del 15 por ciento un poco menos de la mitad votaría por  Gary Johnson,  candidato a la presidencia por el Partido Libertario, fundado en 1971 en favor de una ideología capitalista y de libre mercado.

Gary Johnson es un hombre de negocios de 63 años que participa por segunda vez por la presidencia de la nación.  Entre 1995 y 2003 fue gobernador de Nuevo México, cuando formaba parte del Partido Republicano, grupo al que estuvo ligado hasta 2012, cuando decidió lanzarse a la candidatura por medio del Partido Libertario.

Una de las premisas de su campaña actual es  la de disminuir el presupuesto del ejército, así como evitar cualquier guerra en el extranjero. De igual manera, si llegase a la Casa Blanca le gustaría disminuir impuestos y recortar el personal del gobierno.

La figura de Johnson podría complicarle el camino a la candidata Hillary Clinton, dependiendo de cuánta gente vote por él en estados que tradicionalmente son demócratas. 

Para Geoffrey Skelley, del centro de política de la Universidad de Virginia. “Johnson tiende a lastimar a Clinton un poco más que a Trump. Eso es sorprendente porque los votos del Partido Libertario tienden a ser de hombres blancos, una demográfica más asociada al Partido Republicano”

Evan McMullin

El 6 por ciento de los que apoyarían a otro candidato distinto a los de los partidos tradicionales consideraba apoyar a Evan McMullin, un político que describe sus ideales como conservadores y que es impulsado por una organización ligada al movimiento en contra de Donald Trump.

McMullin  lanzó su candidatura a comienzos de agosto asegurando que aunque “había esperado que este año nos trajera mejores candidatos", las primarias le demostraron que Trump y Clinton "no están preparados para la responsabilidad por la que compiten”.

En 2013, empezó a trabajar como asesor para el comité de asuntos exteriores de la Cámara de Representantes y en 2015 fue nombrado responsable de políticas de los republicanos de la Cámara, puesto que abandonó antes de lanzarse a la carrera presidencial.

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Jill Stein

El 2 por ciento restante indicó su apoyo a  la candidata del Partido Verde Jill Stein de 65 años de edad. Esta es la segunda vez que aspira a la presidencia de Estados Unidos.

Entre sus propuestas destaca su lucha contra el cambio climático con la creación de empleos relacionados a las energías renovables. Además, se ha dedicado a ofrecer soluciones alternativas al problema de los impuestos, pero muchas de sus ideas han sido desacreditadas como casi imposibles.

Muchos estadounidenses conocieron a Jill Stein cuando el senador Bernie Sanders perdió la nominación del Partido Demócrata frente a Clinton. Entonces, algunos empezaron a considerar a la candidata del Partido Verde como una opción viable para la presidencia, ahora que Bernie ya no podía hacerlo.

Joe Exotic

Joe Maldonado mejor conocido Joe Exotic es quizá el candidato independiente a la presidencia de Estados Unidos más caricaturesco de las elecciones de 2016. 

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Joe Exotic ha defendido su postura frente al candidato republicano “No me voy a cortar el pelo, no me voy a vestir diferente, soy gay y soy extremadamente pobre”, en aras de que el público lo conozca mejor. En una elección en la que Donald Trump es candidato, nada de esto es descabellado.

Exotic inicio su campaña por medio de la publicación de vídeos en los que admitía  su homosexualidad y se declaraba amante de los animales.