La ONG Alianza por la Solidaridad y la ONG guatemalteca MadreSelva entregaron este jueves más de 20.000 firmas en la sede central de la constructora española ACS en Madrid para pedir el cese de la construcción de un complejo hidroeléctrico en el río Cahabón, territorio de los indígenas q'eqchies.

Con estas firmas se exige a Florentino Pérez, presidente del grupo, detener la obra que lleva a cabo la empresa Cobra, filial de la española, que impacta a más de 29.000 indígenas quekchí en Alta Verapaz y afecta el caudal de río. La obra se ejecuta a lo largo de unos 30 kilómetros de su cauce.

Según un comunicado de la Alianza por la Solidaridad, el proyecto causa  "graves impactos medioambientales, sociales y económicos a las comunidades afectadas".

Además, las agrupaciones advierten que la obra fue emprendida sin una consulta previa a las comunidades indígenas requerida por la Organización Mundial del Trabajo (OMT) de 1996 y por el Convenio sobre pueblos indígenas de la ONU.

Las organizaciones denunciaron que "no existe informe de impacto medioambiental del proyecto Renace", que se construye en uno de los departamentos más empobrecidos del país centroamericano.

Alertaron, además, que las comunidades que se oponen a la construcción de la hidroeléctrica han sido amenazadas y criminalizadas por manifestarse e intentar hacerse oír abiertamente, siendo víctimas de casos de espionaje, grabaciones ilegales y difamaciones.

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