México descendió cuatro lugares en el Índice de Democracia 2015, debido al descontento social creciente en ese país, publica The Economist. 

México pasó del puesto 10 al 14 en un año en el ránking latinoamericano, gracias a los escándalos de corrupción que rodean el Gobierno de Enrique Peña Nieto. Los anteriores y el caso de la desaparición de estudiantes en Ayotzinapa, son los que mayor peso tienen en el descontento. 

EL DATO

En relación a la corrupción que se le ha atribuido al presidente mexicano, destaca la compra de la Casa Blanca, la cual habría adquirido presuntamente la primera Dama, Angélica Rivera, quien se desempeñara anteriormente como actriz de telenovelas. 

Sin embargo, el pueblo mexicano se mostró insatisfecho en torno a la situación, aún más cuando el paquete de leyes anticorrupción aprobadas el pasado año, fuesen insuficientes para realizar investigaciones al respecto. 

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Por otra parte, está la desaparición de los 43 estudiantes normalistas en septiembre de 2014, por los que la justicia mexicana no ha dado respuesta y ha hecho declaraciones ambiguas en torno al caso, que ha generado innumerables manifestaciones tanto en suelo azteca como fuera de el, para exigir respuestas. 

México obtuvo así, una calificación de 6.6 puntos. El índice cataloga al país dentro del grupo de “democracias con fallas”.

Comparado con el resto del mundo, México ocupa el lugar 66 de 165 países, y cayó nueve lugares respecto a 2014, cuando se encontraba en la posición 57, destaca Proceso. 

Los temas de corrupción hicieron descender posiciones a otras naciones latinoamericanas, como el caso de Guatemala, este último, que condujo a la renuncia de Otto Pérez Molina como presidente, por estar vinculado al caso “La Línea”, la mayor red de corrupción y evasión tributaria en los últimos años de la nación latinoamericana. 

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