Honduras agiliza ley en contra del libre periodismo
El Congreso de Honduras aprobó en febrero pasado una reforma legislativa que califica como terroristas a los pandilleros y a los participantes en manifestaciones de protesta.
En la propuesta legislativa, conocida como Ley para el Fortalecimiento y Efectividad de la Política de Seguridad, se aprobó por el Congreso la reforma al artículo 335B, que en esencia autoriza la sanción con cárcel para cualquier persona o periodista que incite al “terrorismo” públicamente o a través de medios de comunicación.
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El asunto generó preocupación y un fuerte rechazo por parte de organismos internacionales de derechos humanos, del gremio periodístico nacional y de la oposición, quienes denunciaron que la nueva normativa vulnera la libertad de expresión en el país centroamericano.
Con estas nuevas reformas, denuncian los periodistas hondureños, se impone el silencio a comunicadores en casos de violación de derechos humanos, situación que se contrapone al riesgo constante en el que viven quienes realizan la importante labor de informar.
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La situación del gremio periodístico se complica en Honduras. Mientras el Gobierno de ese país aprueba reformas que regulan y limitan la libertad de expresión de los medios de comunicación, los crímenes organizados contra periodistas y trabajadores del gremio continúan en total impunidad.
Según estadísticas de la oficina del Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh), Honduras registró desde el año 2001 cerca de 69 asesinatos de periodistas. El reportero Igor Padilla resultó el primer caso de homicidio de 2017.
Asesinato de periodistas en Honduras
El ejercicio del periodismo en Honduras se ha convertido en una profesión de alto riesgo debido a la violencia del crimen organizado y la impunidad que prevalece en el país.
Un informe del Comisionado de los Derechos Humanos en Honduras reveló que entre 2001 y 2015, unas 63 personas vinculadas a los medios de comunicación fueron asesinadas en ese país centroamericano.
El informe precisa que entre 2014 y 2015, alrededor de 20 personas ligadas a los medios de comunicación son víctimas de la violencia.
De acuerdo con el organismo, al menos el 95 por ciento de los 69 casos de muertes violentas de periodistas en Honduras han quedado impunes hasta ahora.
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El ejercicio del periodismo en Honduras se ha convertido en una profesión de extremo peligro debido a la violencia del crimen organizado y la impunidad que prevalece en el país, estas acciones como consecuencia socava la libertad de expresión y de prensa.
Mientras el Gobierno hondureño presidido por Juan Orlando Hernández se centra en la aprobación de nuevas reformas penales en las que sancionará con cárcel a periodistas que "hagan apología del terrorismo", que incentiven protestas contra el Gobierno y que se muestren a favor de quienes provoquen caos en protestas.