El Centro Nacional de Estadísticas de Salud en Washington informó este jueves la caída de la esperanza de vida en Estados Unidos con una disminución del 0,1 año respecto al 2014. Durante el 2015 murieron 86 mil 212 personas más que el anterior año.

El epidemiólogo y autor principal del informe, Jiaquan Xu, explicó que la última vez que la esperanza de vida al nacer cayó entre el total de la población estadounidense fue en 1993, año cuando las muertes por sida alcanzaron su máximo en Estados Unidos, agravado por un mal año de gripe que resultó en más muertes por gripe y neumonía.

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Una persona nacida en 2015 vivirá una media 78,8 años, frente a los 78,9 de 2014. En el caso de los hombres, la esperanza de vida pasa de los 76,5 a los 76,3 años, mientras que de las mujeres pasa de los 81,3 a los 81,2 años. 

Estas cifras reflejan el aumento de ocho de las diez causas de muerte más frecuentes: las enfermedades de corazón, que subió un 0,9 por ciento; infartos un 3 por ciento, las enfermedades respiratorias crónicas de las vías bajas un 2,7 por ciento; los accidentes un 6,7 por ciento; alzheimer, un 15,7 por ciento; la enfermedad de los riñones, un 1,5 por ciento; el suicidio, un 2,3 por ciento; y la diabetes un 1,9 por ciento.

Solo bajó la mortalidad por cáncer, un 1,7 por ciento, mientras que la de la gripe y la neumonía no varió significativamente.

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Especialistas opinan que también se debe a factores como el desempleo, los hábitos alimenticios o la brecha salarial. Mientras la esperanza de vida de las personas de 65 años no cae, sí lo hace la de los estadounidenses jóvenes o de mediana edad. 

El informe dio a conocer que la tasa de mortalidad general aumentó un 1,2 por ciento en 2015, su primer repunte desde 1999. Más de 2,7 millones de personas murieron, aproximadamente el 45 por ciento de ellas por enfermedades del corazón o cáncer.