Acompañemos al pueblo de Venezuela, sabemos que no están solo, pero demostremos que somos millones los que estamos con este Gobierno bolivariano.

Mauricio Macri representa la clase dominante. Ya vivieron la buena vida y, seguramente, 20 generaciones más, de tanta plata que hicieron... y lo consiguieron del aguantadero del estado. Lo mismo sucede con los Capriles, les duele quedarse sin los privilegios de la buena vida y los medios son los grandes culpables, no enseñan sobre la libertad, menos la verdadera historia. ¡Sumémonos todos cada minuto para apoyar a Venezuela que quiere ser libre!

Macri y Capriles, caraduras, acostumbrados al fraude, al saqueo, mienten con total impunidad.

Mientras que en México mueren 55 por día y en Colombia 65 ciudadanos distribuidos entre el paramilitarismo, el terrorismo de Estado en sus distintos despliegues policiales parapoliciales y la narcopolítica, también les roban la tierra a los originarios, y al que reclama los matan.

Capriles y Macri, Chile, Perú, entre otros. Ante este panorama de terrorismo de Estado no denuncian ni piden la intervención de la OEA, mucho menos a la ONU.

El terrorismo de Estado de estos países mata ciudadanos, entre ellos periodistas, luchadores sociales y políticos, que cuentan la verdad de lo que sucede en estos países.

Esto seguirá sucediendo porque existe un periodismo cipayo como los Lanata, Majul, Castro, Leuco y otros pequeños mercenarios, con empresas monopólicas de la información, que conforman organizaciones (sociedades) de comunicación que atentan contra la paz en países donde no les son afines al poder político en concordancia con los Estados Unidos.

Entonces los Capriles, los Macris, que no son pocos, los traidores que conforman esta gran banda no pueden hablar de progreso y verdad cuando son los chupasangres del “estado aguantadero” y de una constitución advenediza, acomodaticia a sus intereses.

Héctor Moors

Presidente ACDDC