El subjefe del Centro ruso para la reconciliación de las partes beligerantes en Siria, Alexánder Karpov informó este jueves a la prensa local que la coalición liderada por Estados Unidos ha comenzado a mover equipo militar en el este del país árabe.

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"El aumento de la intensidad del transporte aéreo de carga militar y los movimientos terrestres de los convoyes de equipo militar de las fuerzas de la coalición (...) está causando preocupación", dijo Karpov.

Según Karpov, Damasco puede hacer frente de forma independiente a las células terroristas en el territorio del país, y la presencia de contingentes militares de la coalición es ilegal y contraria al derecho internacional.

Además, el funcionario ruso añadió que el aumento de la presencia militar en el noreste de Siria en el contexto de "una situación socioeconómica extraordinaria, generada por las sanciones sofocantes de EE.UU., perjudican gravemente las perspectivas de una solución política".

En 2017, Moscú anunció la derrota del grupo terrorista Estado Islámico y el comienzo de la retirada de sus unidades del territorio sirio. Sin embargo, Estados Unidos continúa su presencia militar en el país, desde 2014, con la excusa de un enfrentamiento a células terroristas en la zona sin el permiso de las autoridades estatales. 

Las fuerzas estadounidenses trasladaron a mediados de abril un convoy de camiones y un avión de carga con refuerzos logísticos a sus bases ilegales en la región de Al-Jazira, en el nordeste de Siria.