Fuerzas del ejército israelí reprimieron este viernes varias manifestaciones de palestinos que rechazan la construcción de asentamientos ilegales en diferentes puntos de la Cisjordania ocupada, lo que dejó a varias personas heridas y otras detenidas.

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Los manifestantes se encontraban en la mezquita Ibrahimi en Hebrón (sur) para repudiar las amenazas israelíes de modificar la estructura y apoderarse del lugar, considerado el cuarto más sagrado del Islam y el segundo de Palestina, además de Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

Los soldados dispararon gas lacrimógeno y granadas aturdidoras contra los palestinos para dispersarlos, lo cual provocó casos de asfixia por inhalación de gas, así como la detención de varios manifestantes.

Similar situación se vivió en Umm al Shaqan, donde también fueron apresados cinco palestinos; mientras que en Naplusa, al norte de Cisjordania ocupada, al menos seis personas resultaron heridas por disparos de las fuerzas de ocupación, indicaron fuentes médicas locales.

Por otra parte, en la aldea vecina de Beit Dajan, el ejército israelí disparó balas recubiertas de goma contra los palestinos que realizaban una protesta anticolonización, hiriendo a cinco de ellos.

Asimismo, en la aldea de Beita, un manifestante fue alcanzado por un bote de gas lacrimógeno israelí en la cabeza. Desde hace más de cuatro meses, en este lugar se realizan protestas casi a diario contra la construcción de un asentamiento ilegal cercano.

Desde la ocupación de Cisjordania por parte de Israel, tras la guerra del Medio Oriente en 1967, se han establecido docenas de asentamientos ilegales, donde las autoridades palestinas estiman que residen cerca de 500.000 colonos.