El Gobierno mexicano lamentó este domingo el fallecimiento de una persona y 15 lesionados tras una explosión en un ducto de la empresa Petróleos Mexicanos (Pemex) acontecida en la ciudad de Xochimehuacán, perteneciente al estado de Puebla.

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“Lamentable que haya perdido la vida una persona hasta ahora, y se encuentren heridos quince más, a causa de la explosión de un ducto de Pemex en Puebla”, escribió el presidente de ese país latinoamericano, Andrés Manuel López Obrador.

 De igual forma, el mandatario mexicano informó que 1396 efectivos de todas las corporaciones de protección civil se movilizaron para realizar los protocolos pertinentes ante desastres de este tipo.

“Ya Pemex tiene el control del incendio y se procurará que las familias desalojadas de sus viviendas permanezcan a salvo”, aseveró el mandatario al tiempo que aseguraba la colaboración total entre el Gobierno nacional y el del estado.

Según aseveró el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, en rueda de prensa ofrecida tras el nefasto hecho, la principal causa del estallido fue una fuga de gas, ocurrida presuntamente por una toma clandestina.

Hasta el momento, según informaciones ofrecidas por medios mexicanos, se reportan afectaciones en al menos 54 hogares y al menos 2000 personas fueron evacuadas luego de que se descubriera la peligrosa fuga de gas.

De los heridos reportados hay al menos cinco graves, tres intubados y otros seis sufrieron quemaduras de segundo y tercer grado en disímiles zonas del cuerpo. El fallecido fue un ciudadano de aproximadamente 30 años de edad que murió en el lugar del estallido.